El entrenador de Always Ready, Eduardo Villegas, aseguró que el arbitraje tuvo “una parcialidad muy evidente” a favor de Boca Juniors y ello se vio reflejado en el penal inexistente que pitó el peruano Kevin Ortega, que derivó en la victoria del xeneize por 0-1, este miércoles en el estadio Hernando Siles de La Paz por la cuarta jornada del Grupo H de la Copa Libertadores de América.
“Seguramente todos lo vieron desde las tribunas. Nosotros también lo vimos desde el campo de juego: una parcialidad muy evidente, sin disimulo porque uno que ve fútbol ve la jugada del penal mal cobrada y de la buena atajada de Pipo (Arnaldo Giménez), incluso pensamos que debía haber cobrado falta a favor de nosotros”, sostuvo Villegas en la conferencia de prensa.
A los 32 minutos del partido, Ortega cobró la pena máxima por una supuesta falta de Giménez sobre Eduardo Salvio.
“Nos pusimos más susceptibles, ya estábamos antes porque los cobros iban siendo más parcializados hacia Boca. La permisividad de generar tiempo de jugadores que se tiraban al piso sin ningún golpe ni infracción; todo eso ha generado esta situación incómoda que no la quiero justificar completamente, no jugamos bien como en otros partidos, pero si no convierten el gol y (el árbitro) no se inventa ese penal la historia podría ser distinta”, agregó.
Cansancio
Villegas también recalcó que la baja producción de sus jugadores en el cotejo internacional fue por el desgaste físico que tiene su plantel debido a la seguidilla de partidos.
“Nuestro bajo rendimiento hoy pasa por la parte física, por el degaste que hemos tenido. Tuvimos partidos muy fuertes y el último (contra Bolívar) fue muy estresante y nos tocó jugar más de 90 minutos con un hombre menos en El Alto. La derrota por supuesto que afecta emocionalmente a los jugadores más allá de que intentamos hacer el trabajo de recuperación con la parte médica”.
Por último, se refirió a las expulsiones, ya que en los últimos partidos al menos un jugador de su equipo vio la cartulina roja.
“Hemos tenido esa situación pese a que hemos trabajado en ello y lo hemos recomendado. Es una sumatoria de carga física, estrés, de la seguidilla de partidos que los jugadores sienten y la reacción inmediata es una agresividad. Admito eso y lo tenemos que trabajar, analizar y no dejar a sus compañeros dentro de la cancha con inferioridad numérica porque eso se siente en todos los partidos”.