Un gol del ex atigrado Wálter Veizaga a los 91 minutos tumbó a Blooming y le dio a Tomayapo su primera victoria (0-1) desde que Álvaro Peña asumió hace seis partidos como técnico del equipo tarijeño, este miércoles por la tarde en el estadio Tahuichi Aguilera de Santa Cruz.
Veizaga se hizo cargo de un penal luego de una mano clara del defensor Leonardo Urapuca, convirtiendo el único tanto del encuentro y rompiendo la igualdad que parecía sellar el resultado.
Los dos equipos llegaron a la jornada 20 sin haber ganado en sus últimos nueve cotejos y situados en la parte baja de la tabla de posiciones.
Tomayapo rompió la mala racha y llegó a 21 unidades, alejándose de la zona del descenso indirecto.
En cambio, Blooming, en su décimo encuentro sin victorias (8 derrotas y 2 empates), se quedó con 15, igualado en el penúltimo lugar con Real Potosí, ambos en zona de peligro.
Todo mal
Al celeste cruceño todo le salió mal, pues no solo perdió el encuentro en los descuentos, sino también a dos jugadores por lesión, uno de ellos su capitán Christian Latorre (en el primer tiempo) y el otro Kevin Farell (segunda parte), y para colmo a los 64 minutos se quedó con 10 jugadores por la expulsión de Abraham Cabrera.
En la primera parte, Blooming hizo mejor las cosas y desperdició varias chances de abrir la cuenta, la más clara a los 14 minutos cuando Edward Vaca, a metros del arco, sin marca y sin arquero mandó el balón por un costado.
La visita a momentos aguantó las llegadas del rival, pero en otros pasajes también buscó la portería contraria.
Del tarijeño
En la segunda mitad las cosas fueron diferentes. El ingreso de Moisés Calero le dio más potencia a la ofensiva de Tomayapo, entonces generó varias opciones de gol y además fue protagonista de la expulsión de Cabrera. El defensor no tuvo otra que bajarlo cuando le ganaba en velocidad.
A los 82’, en un contragolpe, Rafinha habilitó a Óscar Ribera, quien recibió habilitado, mandó el centro y el juvenil Fabricio Quaglio (17 años) anotó el gol, pero el juez de línea Rubén Flores cobró una inexiste posición adelantada, privándole del gol a Blooming.
Cuando el partido se acaba, Urapuca saltó a despejar la pelota con la mano levantada, el árbitro no tuvo dudas para cobrar la falta y Veizaga le dio la victoria a su equipo.