La crisis institucional en San José es una novela de nunca acabar y el más reciente capítulo es la determinación de los socios de dar un plazo de 24 horas al presidente del club, David Rivero, para que presente su renuncia, caso contrario será desconocido y removido de sus funciones.
Un mes después de su llegada a la presidencia (3 de enero) mediante una elección, Rivero tambalea en su cargo debido a la presión de los socios e hinchas del club que no ven una solución a la difícil situación por la que atraviesa el club.
La nueva dirigencia no ha podido solucionar la crisis económica. En la parte deportiva, hasta el momento el cuerpo técnico, encabezado por Domingo Sánchez, solo se ha dedicado a observar talentos jóvenes sin experiencia en la categoría profesional, en procura de conformar un plantel, ya que no hay manera de hacer contrataciones.
La noche del lunes hubo una asamblea de socios en la que los dirigentes Zenón Huarachi, Alex da Rosa y Christian Barrientos renunciaron a sus cargos, quedando solos en la directiva Rivero y Serapio Humérez, a quienes se les dio 24 horas para que opten por el mismo camino.
Los socios tienen lista la sucesión con Marcelo Soruco, empresario dedicado a la construcción y bienes raíces, quien un día antes de las elecciones había retirado su candidatura.
“Me asustaría la deuda (unos 6.000.000 de dólares) si no tendría apoyo, sé que el departamento de Oruro nos ayudará si empezamos a manejar con voluntad y empeño las cosas. Seremos el motor de una maquinaria a la que estoy seguro que muchos se van a plegar si demostramos trabajo y esfuerzo”, declaró Soruco.
Rivero no se pronunció y la única versión oficial del club es que la asamblea no fue legal al no haber sido convocada por el directorio.