San Antonio y Bolívar disputarán este domingo (17.00) en el estadio Félix Capriles de Cochabamba la finalísima de la temporada 2024 del fútbol profesional boliviano. El ganador será el nuevo campeón nacional; además, llevará a sus arcas un millón de dólares de premio.
La batalla final por el título nacional debía ser en dos capítulos, ida y vuelta, pero en un cierre apresurado del año, con partidos desde hace un mes todos los días y con equipos jugando en varios casos cada 48 horas, la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) y los clubes involucrados decidieron pasar por alto la convocatoria y optaron porque haya solo un encuentro en campo neutral.
San Antonio saldrá al juego en el escenario valluno en busca de la primera estrella de su historia en la máxima categoría del país gracias a que fue el ganador del torneo Apertura —“por series”— jugado durante el primer semestre del año; Bolívar, en cambio, luego de consagrarse hace un par de días como titular del Clausura —“todos contra todos”—, tratará de llevar a sus vitrinas la trigésima primera corona desde que ganó la primera en 1950 y la vigésima quinta a partir de la creación de la Liga en 1977, hoy convertida en División Profesional.
La FBF entregará al vencedor la Copa Federación Unida, el trofeo rotativo que pasará a nuevas manos después de que en 2023 lo alzó The Strongest como campeón nacional.
Aparte, el nuevo monarca también recibirá un premio de un millón de dólares, que es el aporte de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) para cada una de sus diez asociaciones nacionales.
En 2025, San Antonio y Bolívar jugarán la Copa Libertadores de América directo a partir de la fase de grupos. Ambos aseguraron, al llegar a esa instancia, una bonificación de al menos 3 millones de dólares cada uno, que es lo que entrega la Conmebol a cada uno de los 32 participantes en el cuadro central de su principal torneo de clubes.
The Strongest (Fase 2) y Blooming (Fase 1) son los otros bolivianos clasificados a la Copa del año que viene.