Jugadores de Real Santa Cruz están en paro como medida de protesta por las deudas salariales que mantiene la dirigencia con ellos, mientras que el estadio del club mantiene cerradas sus puertas exhibiendo crespones negros en señal de duelo por el fallecimiento, ocurrido el viernes, del jugador colombiano Guillermo Denis Beltrán.
Real solicitó al club The Strongest la postergación del partido que ambos equipos debían jugar el viernes en Montero por la séptima jornada del torneo Apertura de la División Profesional; con la aceptación atigrada, el encuentro fue llevado al 11 de abril, después de la conclusión de la fase de grupos del certamen, según reprogramó la Comisión de Competiciones de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF).
Los futbolistas dejaron de practicar en la fecha. Diez de El Deber confirmó hablando con uno de ellos que la medida obedece a la falta de pago.
Todos los integrantes de Real mantienen silencio luego de lo ocurrido el viernes, cuando en pleno entrenamiento Denis Beltrán se desvaneció y por la gravedad de su situación fue trasladado a una clínica, donde perdió la vida.
La madre del futbolista está en Santa Cruz realizando los trámites para conseguir los permisos y poder trasladar el cuerpo de su hijo a Colombia.
Luego de ocurrido el deceso del jugador trascendió la falta de condiciones para su auxilio inmediato, un video mostró que fue trasladado en un vehículo particular mientras una persona le aplicaba masajes cardiacos en procura de reanimarlo.
En la cancha donde entrenaba no había un desfibrilador, de uso obligatorio de los clubes ante situaciones de emergencia.
Con la postergación del encuentro frente a The Strongest, el próximo partido de Real Santa Cruz será el domingo 7 de abril en una visita a Tomayapo de Tarija por la octava jornada del torneo Apertura.
Real pertenece al Grupo A y prácticamente quedó sin posibilidades de acceder a los cuartos de final del campeonato.