Ramiro Vaca ya está concentrado con la selección nacional de fútbol. El mediocampista, ex The Strongest, llegó este lunes temprano, procedente de Bélgica, donde juega para el Beerschot.
La Verde visitará el jueves a Perú en Lima y unos días después, el martes, recibirá a Uruguay en La Paz, en la doble jornada de noviembre por las eliminatorias para el Mundial de Catar 2022.
“Acabados de jugar con Perú, lo conocemos muy bien”, declaró Vaca, en alusión a que en la triple jornada de octubre fue uno de los rivales a los que la Verde derrotó en La Paz, en un partido reprogramado de marzo.
“Pero también sabemos que como local es una selección muy fuerte”, agregó.
Bolivia ocupa el séptimo lugar de la tabla con 12 puntos —igual que Paraguay—; Perú está en el noveno, con 11. Esas selecciones todavía se ilusionan para meterse en la lucha por uno de los cuatro accesos directos al Mundial o al menos por ubicarse en quinto puesto, que dará derecho a un repechaje. En esa posición se encuentra al momento Uruguay, con 16. Al premundial aún le quedan seis fechas por disputar, o sea 18 unidades en juego.
“Estamos muy cerca” de ese quinto puesto, “pero también somos conscientes de que alcanzarlo será algo muy difícil; sin embargo, estamos ilusionados”, enfatizó.
Vaca llegó “bien” futbolística y físicamente. A su club le ha ido mejor en sus últimas presentaciones: dos victorias, una por la Copa de Bélgica y otra por la Liga, y un empate. “Se nos escapó el triunfo en el final”, remarcó.
El futbolista nacional ya se ganó la titularidad en el fútbol belga, con ese impulso aterrizó en El Alto y de inmediato se dirigió a la concentración en el centro de La Paz. “Tengo mucha ilusión y fe en que lograremos un buen resultado en Perú, ojalá sea un triunfo”, cerró.
Ahora solo falta la llegada de Carlos Lampe, el arquero del Vélez Sarsfield argentino, programada para la noche del lunes.