Era el partido del año y había que ganarlo a como dé lugar, The Strongest lo hizo con garra, y su premio no solo fue tumbar a Bolívar en el gran clásico (1-0), sino también regresar a la punta en solitario y convertirse en el mayor candidato al título del torneo de la División Profesional, este domingo por la vigésima sexta jornada y a solo cuatro fechas para el final.
Todo le salió al Tigre a pedir de boca: la caída de Independiente el día anterior, la derrota horas antes de Always Ready y, la cereza sobre la torta, su triunfazo ante la Academia, un “cóctel” que lo pone ahora en la punta con gran chance de dar la soñada vuelta olímpica.
The Strongest llegó a 56 puntos, Always se quedó con 54, Independiente no se movió de sus 53 y Bolívar quedó rezagado con 49, virtualmente fuera de la lucha por el título.
Rolando Blackburn, a los 49 minutos, fue autor del único gol. Pero Daniel Vaca, con sus notables atajadas, fue la figura en una tarde-noche enteramente stronguista.
Bolívar fue mejor, pero…
Un zurdazo de Kevin Salvatierra a los 10 minutos fue el primer aviso de que la Academia tenía entre sus planes no dejar pasar esta oportunidad para acercarse a los de arriba.
En un partido con poco lucimiento, muy trabado, jugado con cautela de parte de ambos para no equivocarse, Bolívar se posó más firme en la primera etapa. De esa manera, el celeste de Zago de a poco fue controlando el terreno y el balón, aunque no necesariamente con claridad.
El The Strongest de Cristian Díaz tenía su estrategia: primero, no recibir ningún gol; segundo, el empate no le incomodaba; tercero, ver de llegar al gol en cualquier momento.
Se dio tal cual lo había planeado. Claro que le tocó sufrir.
La Academia estuvo cerca del gol con un disparo de Víctor Ábrego, que tapó Vaca, y sobre todo con un tiro libre lanzado por Erwin Saavedra, sin embargo, la pelota dio en el travesaño.
En la recta final, Vaca sacó con los puños un lanzamiento de Alex Granell y después se salvó ante un tiro de Hernán Rodríguez, desviado.
La historia a favor de Bolívar desde lo futbolístico no tuvo repercusión en el resultado y eso iba a ser determinante.
El gol que cambió todo
Cuatro minutos después de volver del descanso (49), The Strongest halló el gol que a la larga fue el del triunfo. El centro de Raúl Castro pescó mal a Luis Gutiérrez, su rechazo fue corto y Blackburn no perdonó ante la desesperada salida de Rubén Cordano.
El golpe no fue asimilado bien y, para colmo de males, Ramos se fue expulsado a los 53 con doble amarilla por golpear desde atrás a Castro.
Aún así, con 10, la Academia estuvo cerca del empate, evitado por Vaca más de una vez: primero ante Rodríguez, luego frente a Miranda. Eran “casi goles” que el capitán evitó con toda su experiencia.
Pero también el Tigre tuvo a su merced a Bolívar más de una vez. En una tapó Cordano, en la otra, Jaime Arrascaita se perdió el segundo de manera increíble.
El pitazo final desató la algarabía stronguista y los lamentos bolivaristas. Un contraste entre el equipo que se mete de cabeza hacia el título, con mucha chance de ganarlo, y otro que, salvo un milagro, ya le toca despedirse hasta la próxima.