Nápoles fue la otra “casa” de Diego Maradona, idolatrado por los habitantes de esa tierra italiana donde vivió un gran momento futbolístico hasta coronar a su humilde club de fútbol en campeón del Calcio.
Adelantándose por la diferencia horaria a lo que sucedía en Argentina, los napolitanos realizaron un peregrinaje conmovedor delante del estadio San Paulo, donde vieron jugar espectaculares partidos a su ídolo.
Justo el día en que en Nápoles enfrentaba por la UEFA Europa un partido ante el HNK Rijeka
“Con bengalas de humo, fuegos artificiales, un grupo numeroso de tifosi cantaron y alentaron en las cercanías de lo que pronto será llamado Estadio Maradona en honor a quien fuese campeón de dos Scudettos, una Copa UEFA, una Copa de Italia y una Supercopa italiana a finales de la década del 80”, informó Infobae.
También se realizó “el aplauso más grande del mundo”, que inició cuando terminó el minuto de silencio de la previa del encuentro.
Desde muchas ventanas de Nápoles se hizo sentir la manifestación de la gente en homenaje a Diego, su hijo predilecto, “para que el mundo sienta que nunca lo olvidaremos, que Diego es nuestro hijo y hermano más querido”.
El Napoli retiró definitivamente en 2006 la camiseta número 10 para homenajear a Maradona.