Al comenzar la década de los años 70, Rubén Almagro fue una de las figuras de 31 de Octubre, el equipo que representaba a la Corporación Minera de Bolivia (Comibol). En La Paz, también jugó en Always Ready y Municipal en los primeros años de la Liga del Fútbol Profesional Boliviano. Asimismo, defendió la camiseta del orureño San José. Fue un jugador destacado en todos sus clubes.
El Pato Almagro —así era conocido— falleció el domingo a los 72 años de edad. Proveniente de Argentina (era de Tartagal, en Salta), llegó a Bolivia cuando todavía no había cumplido 20 años y se quedó para siempre en el país. Aquí hizo su carrera y construyó su familia.
Era un talentoso futbolista. Los rivales sufrían de su habilidad con la pelota y también de su cuota goleadora. Era gambeteador, armaba las jugadas ofensivas de su equipo y tenía notable destreza para los goles de tiro libre.
En octubre pasado, por el Día del Futbolista Boliviano, la Mutual de Exjugadores de Fútbol de La Paz llevó adelante un acto conmemorando esa fecha. Almagro estuvo presente compartiendo con quienes fueron sus amigos y compañeros. Varios de ellos reaccionaron este lunes a través de las redes sociales por su partida.
En “31” tuvo compañeros como Telmo Paredes, Vicente Castro, Carlos Dalmazone, entre otros.
Con Paredes hacían una gran dupla en ataque. “Ambos destacaron con nitidez en 31 de Octubre, un club de excelente fútbol entre 1973 y 1976 bajo la dirección de Mario Calderón Otondo y Wilfredo Camacho”, recordó el periodista Mario Roque.
Terminada su carrera en el fútbol profesional, el Pato Almagro —que también tuvo un fugaz paso por Bolívar— continuó su andar como funcionario del Banco Boliviano Americano. En esa época se desarrollaba todos los años el Campeonato Interbancario y él era de una de las figuras junto con otros futbolistas que también siguieron ese camino.
Su lugar en la vida fue La Paz, donde vivió por más de 50 años y donde ahora descansa en paz.