1930
Sede: Uruguay
- Primer Mundial de fútbol organizado por la FIFA. Participaron Uruguay y 12 seleccionados invitados (9 de América y 4 europeos). Se disputó íntegramente en Montevideo y duró 17 días.
- En la final, Uruguay se impuso a Argentina por 4-2. El último gol fue convertido por Héctor Castro, quien fue llamado en el tiempo como el “Divino Manco” por su brazo sesgado desde los 13 años por una motosierra.
- Guillermo Stábile fue el goleador del torneo con 8 goles y autor del primer triplete en la historia de los Mundiales.
El mes de julio de 1930 pasó a la historia del fútbol por celebrarse por primera vez el Mundial. Organizado por la FIFA, Uruguay fue escogida como sede debido a la celebración del centenario de la Jura de su Constitución. Muchas selecciones no llegaron a entender cómo el país sudamericano había sido nombrado organizador. Por este motivo, la primera edición del Mundial estuvo marcada por el boicot.
Inglaterra no participó porque decían que fueron ellos los que inventaron el fútbol y que, por tanto, el primer campeonato mundial debía celebrarse en ese país. Otros combinados europeos tampoco asistieron porque la distancia era muy larga (en aquella época se tenía que cruzar el charco en barco). Pese a que la organización se comprometió a correr con todos los gastos de las selecciones, sólo 13 acudieron a una cita que fue histórica.
La final del Mundial de Uruguay la disputó la anfitriona contra Argentina. Ambas selecciones tenían un equipo que destacaba de las demás por su enorme calidad y la final no defraudó. Los charrúas se hicieron con el primer título mundial a nivel de selecciones al derrotar por 4-2 a Argentina. Sin lugar a dudas, el Mundial de 1930 fue un evento que cambió la forma de ver el fútbol a todos los aficionados.
Estadios
El Mundial de Uruguay es el único que se ha celebrado sólo en una ciudad: Montevideo. Estaba previsto que se disputara todo el campeonato en el estadio Centenario, pero debido a las obras del mismo tuvieron que celebrarse varios partidos en el estadio de Pocitos y en el de Parque Central.
La Copa Jules Rimet
Aunque originalmente el trofeo se llamó Victoria, más tarde se le otorgó el nombre del gran valedor del campeonato.
El goleador
Guillermo Stábile, el delantero por aquel entonces de Huracán, logró ocho goles en cuatro partidos en su única participación en un Mundial. Stábile viajó a Montevideo como suplente de Ferreyra. De hecho, no jugó el primer partido ante Francia, pero acabó siendo titular indiscutible por una crisis nerviosa de Norberto Cherro.
El balón
Cada selección jugaba con su propio balón, por lo que en cada parte solía haber uno diferente. Su dibujo era en forma de ‘T’ y varios futbolistas se quejaron por la dureza del mismo.
La revelación
Estados Unidos, el equipo estaba compuesto por ex-jugadores profesionales escoceses como John Word, James Gallacher, James Brown y Bert McGhee. Llegaron hasta semifinales, donde cayeron contra Argentina por un 6-1.
La decepción
Brasil. Los jugadores del torneo paulista no quisieron viajar a Uruguay, menospreciando la cita de Montevideo. Además, su mejor futbolista, Arthur Friedenreich, no pudo jugar por no ser totalmente blanco ya que el fútbol brasileño era muy clasista por aquella época.
El personaje
Héctor, el Manco Castro. El delantero no sólo pasó a la historia por ser el autor del primer gol de Uruguay en un Mundial sino también por jugar al fútbol a pesar de no tener la mano derecha. Castro se cortó accidentalmente su antebrazo con una sierra eléctrica cuando tenía 13 años. Le apodaron ‘El divino manco’.