Independiente regresó esta temporada a la División Profesional. Lo hizo, además, de la mano de una mujer, la presidenta del club Jenny Montaño.
Bajo su mando y la del técnico Marcelo Robledo, “Inde” es la sensación de la temporada. Con poco presupuesto, muy por debajo de los grandes, está peleando por el título. Ella dice por qué…
– ¿Cómo vive estos días previos a la última jornada del torneo de la División Profesional?
– Esperando el último partido con el deseo de que nos vaya bien, sumar los tres puntos y que los otros resultados nos favorezcan para ser campeones, o al menos para llegar al segundo puesto.
– ¿Le conforma el que Independiente ya haya sido protagonista de una gran campaña, aunque no sea campeón?
– Estamos prácticamente conformes con lo que se ha conseguido, pero hay la esperanza de levantar la copa en Montero y para eso confiamos mucho en el plantel.
Además, percibimos el sentimiento de los hinchas que buscan siempre más y más, viendo la capacidad del equipo. Como directiva también creo que podemos.
– ¿Cuál ha sido la clave para semejante campaña en el primer año desde el regreso a Primera?
– Se armó un plantel competitivo, para ello la comisión técnica ha trabajado de cerca con el cuerpo técnico y los jugadores. El club les ha brindado toda su confianza. Muchos nos decían que teníamos futbolistas pasados y otras cosas, pero gracias a Dios hemos sabido sacar adelante la temporada. Hubo problemas al inicio, pero también fue importante para fortalecernos con base siempre en el respeto.
– ¿En qué lugar de las posiciones se imaginaba al club al comienzo de año?
– Nuestro primer sueño era estar entre los ocho mejores e ir paso a paso. Eso les dijimos a los jugadores, pero ellos desde el inicio me dijeron: ‘presidenta, vamos por el campeonato’ y comenzamos a ilusionarnos.
Soñamos y fue importante ir con calma porque los resultados comenzaron a llegar. Confiamos en el grupo que se presentó en cada cancha con ganas de triunfar, nunca fuimos por un empate. Al cuerpo técnico le dimos todo el respaldo en sus decisiones, nunca le condicionamos a que un mal resultado le podía sacar del equipo. A (Marcelo) Robledo le dijimos que iba a ser nuestro entrenador en todo el año y ahora estamos aquí.
– ¿Siente que la campaña de Independiente ayudó al fútbol boliviano?
– Hicimos una buena labor. Aportamos y luchamos y ahí están los resultados: Mijail Avilés no estaba en el fútbol, volvió y es un buen aporte para el equipo, se registraron las apariciones de los jóvenes Denilson Valda y Yesit Martínez, quienes han dado mucho. Hicimos cosas que pienso que otros clubes del país deben aprender de Independiente. Tenemos una planilla baja, no estamos como otros clubes donde pagan hasta ocho veces más. Aquí es con orden y disciplina para que las cosas lleguen.
El plantel es bien llevado por su capitán y el técnico, tiene una vida ordenada, aquí no hubo necesidad de controlar qué hacían los jugadores fuera del entrenamiento, no se presentaron cosas que incomodan, todo eso ha sumado para el club.
«Confiamos en el grupo que se presentó en cada cancha con ganas de triunfar, nunca fuimos por un empate. Al cuerpo técnico le dimos todo el respaldo en sus decisiones, nunca le condicionamos a que un mal resultado le podía sacar del equipo».
– ¿Está al día el club en materia económica?
– Hemos cumplido con todo, solo nos queda una planilla por pagar que se cumplirá hasta el viernes; es decir, cerraremos planillas antes de viajar para quedar con cero deudas y sin problemas.
– ¿De dónde salieron los recursos para la cobertura de sueldos?
– Tenemos el primer aporte de la televisión, pero no alcanza para solventar el gasto y tuvimos que sacar de nuestros ahorros. Este año no hubo mucha gente en los estadios por la pandemia y los auspiciadores recién nos están desembolsando recursos. No fue sencillo, pero lo logramos porque cumplimos con los jugadores.
– ¿Qué premio se aseguró el plantel por esta campaña?
– Las cosas aquí son transparentes. Hay un acuerdo para darles un premio, que es una buena cantidad de dinero porque entendemos que los jugadores han luchado por eso y es correcto que los dirigentes cumplamos.
Le vamos a dar al plantel el 23.5% del monto que nos llegue de la Conmebol, según la posición que ocupemos (705.000 dólares en caso de ser Bolivia 1 o 2 en Libertadores; o 117.500 si se clasifica como Bolivia 3).
Con sueldos al día sus familias han estado tranquilas, sus niños con el estómago lleno y ellos se han preocupado solo por rendir bien. Cumplimos a cabalidad y lo mismo sucederá con los premios.