Always Ready no se cansa de mandar a la “silla eléctrica” a sus entrenadores, su nueva víctima es el paraguayo Pablo Godoy, a quien la directiva le bajó el pulgar y ya le busca reemplazante antes de que comience oficialmente la temporada 2022.
Desde 2019, cuando jugó su primer torneo en su regreso a la División Profesional, la dirigencia de la banda roja se ha caracterizado por “quemar” directores técnicos, hayan sido o no exitosos los que pasaron por el cargo.
A falta de la comunicación oficial, Godoy no seguirá a pesar de haber estado a cargo del plantel desde junio de 2021 con la obtención del subcampeonato y haber conducido la pretemporada 2022. Según trascendió, al presidente Andrés Costa y compañía no les convenció la producción del equipo en los partidos amistosos jugados la semana pasada en Cochabamba.
Un cargo inestable
En tres años en la División Profesional, la banda roja ha despedido a seis entrenadores, a tres de ellos dos veces.
En 2018 y de la mano del mexicano David de la Torre, Always Ready logró el ascenso a la principal categoría del fútbol profesional boliviano.
El DT solo duró tres partidos en la Liga de 2019 y fue echado.
Ese año, el club llegó a tener cuatro entrenadores, porque luego llegaron Julio César Baldivieso hasta septiembre, Sebastián Núñez hasta diciembre y Godoy —hombre de las divisiones inferiores del club— se encargó de cerrar la temporada.
En 2020 asumió Eduardo Villegas y fue el que más tiempo estuvo en el cargo, hasta principios de diciembre, pero inexplicablemente hubo un acuerdo para la recisión.
Para las pocas fechas que estaban pendientes fue contratado el argentino Omar Asad, quien dio la vuelta olímpica con Always Ready.
En 2021, la sorpresa fue la llegada al banco otra vez de Núñez, aunque solo de enero a abril. La dirigencia lo pensó mejor y a partir de ahí recuperó a Asad, pero lo despidió en junio.
Desde entonces asumió Godoy para ser subcampeón. Este jueves, él mismo admitió que no seguirá en el cargo.