La selección nacional desarrolló este domingo por la tarde su primer entrenamiento, de los dos que ha programado en el Complejo Pedro Pompillo, la Casa Amarilla del Club Boca Juniors, al lado de la Bombonera en la capital argentina Buenos Aires.
Fue una sesión matizada desde la calle por hinchas bolivianos radicados en Buenos Aires que fueron a apoyar a cuerpo técnico y jugadores, y a través de un parlante hicieron sonar la canción La Bomba del grupo Azul Azul, un tema que ha sido “adoptado” por los futbolistas para celebrar sus más recientes triunfos.
Mientras el plantel desarrollaba su trabajo, los jugadores escuchaban a lo lejos la “explosión” de La Bomba, con la que los aficionados se alegraban.
“Como en el 93 nos vamos a clasificar, vamos a ir al Mundial otra vez en Estados Unidos”, decía uno de los hinchas.
Más temprano hubo un “banderazo” en las afueras del hotel de concentración del seleccionado.
El grupo al mando de Óscar Villegas sesionó a puertas cerradas y mantuvo en la más absoluta reserva la tarea desarrollada.
El DT no podrá contar con dos jugadores que fueron titulares ante Colombia (1-0): Héctor Cuéllar por expulsión y Jeyson Chura por acumulación de tarjetas amarillas.
Uno de los ingresos desde el vamos será el del lateral izquierdo Roberto Carlos Fernández, aunque no precisamente en esa función sino más adelantado. El futbolista proveniente de Rusia no estuvo en el anterior encuentro debido a que debía cumplir un partido de suspensión por acumulación de tarjetas amarillas.
Villegas definirá entre Gabriel Villamil y Víctor Cuéllar para cubrir la otra plaza vacía, tomando en cuenta que se prevé que en el resto de la formación repita la que inició el anterior juego.
La selección nacional tendrá otro entrenamiento en Casa Amarilla el lunes.
Argentina y Bolivia jugarán el martes desde las 20.00 (hora boliviana) en el estadio Monumental del club River Plate, por la décima jornada de las eliminatorias para el Mundial 2026.