El presidente del Estado, Luis Arce, encogió los hombros y solo atinó a decir “ese gol no me gustó”, al abandonar el palco oficial del estadio Hernando Siles, donde presenció la derrota de The Strongest a manos de Boca Juniors (0-1) en el inicio del Grupo C de la Copa Libertadores de América.
El mandatario, declarado seguidor stronguista, aceptó la invitación que le extendió la directiva del club de sus amores para asistir al encuentro.
Llegó a Miraflores unos minutos antes del inicio de las acciones. Se marchó cuando el árbitro dio por finalizado el juego.
Lamentó el tanto que a los 7 minutos convirtió Sebastián Villa, con el que Boca se llevó los tres puntos.
En el palco central estuvo acompañado por el titular atigrado Ronald Crespo y la vicepresidenta Verónica Palenque; a ellos se unió el presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), Fernando Costa.
Más tarde llegaron otras autoridades, entre ellas la ministra de la Presidencia, María Nelia Prada.
Luciendo una chalina del Tigre, Arce fue amable con algunas personas que en el cuarto piso del estadio le solicitaron tomarse una fotografía.
No dio ninguna declaración. Por dentro se llevó la decepción de no haber visto ganar a su equipo.