Antes de la Copa América se daba por hecho que Roberto Carlos Fernández iba a jugar en el Legia de Polonia; sin embargo, pasado el torneo de selecciones para Bolivia, esa posibilidad se ha caído y por ahora el jugador tiene que regresar a Bolívar.
El lateral izquierdo jugó la primera mitad de la temporada cedido por la Academia en el FC Baltika y tuvo un buen desempeño, pero el club ruso no hizo uso de la cláusula de compra debido a que su equipo descendió a la segunda división.
Desde Polonia “llovieron” las versiones en sentido de que el Legia se había puesto en campaña para contratar a Fernández, aunque cuatro semanas después no hay nada.
Al llegar a Bolivia para sumarse a la selección nacional que viajó a Estados Unidos, el jugador admitió que su prioridad era la de continuar en el exterior.
Desde el entorno del jugador hay silencio y lo propio ocurre en filas de la dirigencia de su club boliviano.
Los futbolistas de Bolívar que fueron cedidos a la Verde volverán a su club esta semana luego de un corto descanso y Fernández deberá estar entre ellos por su contrato con el club.
Si no hay novedades en las siguientes horas, el lateral izquierdo se convertirá en otro refuerzo celeste para el segundo semestre del año, en el que la Academia buscará el título del torneo Clausura y afrontará en agosto los octavos de final de la Copa Libertadores de América ante el brasileño Flamengo.