La semifinal del Campeonato Interprovincial tuvo un insólito cierre el fin de semana, cuando el árbitro paceño Miguel Balboa dio por finalizada una tanda de penales siendo que el resultado no estaba aún consolidado.
La serie fue jugada por Sporting Coroico y 26 de Febrero de Colquiri.
Al cabo de los dos encuentros, el primero jugado en La Paz y el segundo en Colquiri, hubo un empate en puntos que obligó a ir a una definición vía lanzamientos penales.
Sporting Coroico remató cuatro veces y solo convirtió un gol; 26 de Febrero disparó tres y anotó dos (1-2).
Luego del cuarto penal ejecutado por Coroico, el árbitro Balboa dio por concluida la tanda y declaró ganador al representante de Colquiri.
Fue un grave error del juez porque el score —hasta ese momento de 1-2— no estaba resuleto, pues había la posibilidad de que se diera un empate al cabo de la tanda de cinco si 26 de Febrero erraba los dos tiros que aún le quedaban y si Coroico convertía el suyo.
Luego del pitazo final los jugadores del equipo de Colquiri celebraron. El capitán de Coroico, Jaime Salazar, denunció que ni siquiera le dejaron firmar la planilla.
Este martes, Sporting Coroico emitió un comunicado por “las graves irregularidades y errores cometidos por el árbitro principal Miguel Balboa y sus colaboradores, en el partido de vuelta por las semifinales del Torneo Interprovincial 2025”.
Anunció que ha decidido “tomar las acciones legales deportivas correspondientes para defender la transparencia y el juego limpio en el fútbol”.
Balboa ha dirigido esta temporada cinco partidos de la División Profesional del fútbol boliviano. Además, estuvo en varios encuentros de la Copa Simón Bolívar.
En esa semifinal estaba en juego el pase al partido por el título, además de la clasificación a la Copa Simón Bolívar —de ascenso a la División Profesional— del próximo año.
