El lanzamiento de varios petardos por parte de hinchas de Oriente Petrolero en ambos tiempos del partido con Wilstermann (1-1) casi hace que se suspenda el compromiso de es te lunes válido por la novena jornada del Grupo A del certamen “seriado” de la División Profesional.
Los aficionados albiverdes que se ubican en una de las curvas del estadio Tahuichi Aguilera de Santa Cruz mostraron su malestar con los futbolistas por el mal presente del club en la temporada.
A los 40 segundos de iniciarse las acciones lanzaron varios petardos y uno de los afectados fue su arquero Wilson Quiñónez y por ello el árbitro Nelson Barro tuvo que parar el encuentro hasta que se calme la situación.
Luego de 8 minutos se reanudó el cotejo y se desarrolló con normalidad hasta que, en la segunda mitad, cuando Oriente perdía 0-1 por el tanto de Jhon Velásquez (47’), nuevamente la afición albiverde lanzó petardos con cánticos contra sus jugadores.
El capitán Maximiliano Caire y Quiñónez fueron hasta la curva para intentar tranquilizar a los hinchas, pero les lanzaron de todo.
Barro dio una advertencia a ambos clubes indicando que si había un petardo más se suspendería el cotejo, que se reanudó 13 minutos después.
El tanto de la igualdad de César García a los 68’ calmó a los aficionados locales, que tras el pitido final nuevamente lanzaron petardos a la cancha.
Oriente no pasa por un buen momento, pues aparte de no clasificarse a los cuartos de final del torneo “por series” también lucha por no entrar a zona de descenso.