Guido Loayza está en desacuerdo con lo que hizo la actual Federación Boliviana de Fútbol (FBF), encabezada por Fernando Costa, de cambiar de escenario para los partidos de la selección nacional en eliminatorias mundialistas. “Le han faltado el respeto al Siles”, enfatiza el extitular de Bolívar.
Desde la anterior doble jornada premundialista, la FBF hizo a un lado al estadio Hernando Siles y, en su lugar, anotó al Municipal de Villa Ingenio, de El Alto, donde la Verde le ganó a Venezuela en septiembre y recibirá en octubre a Colombia.
Loayza hizo historia como presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF). Durante su gestión, Bolivia se clasificó al Mundial de Estados Unidos 94, lo hizo por primera vez por mérito propio. Todos sus partidos los jugó en Miraflores, como casi siempre en eliminatorias.
Además, fue parte de la lucha contra el veto a la altura y en defensa del mayor escenario deportivo del país.
“Nos ha costado como 10 años consolidar al Siles como la casa del fútbol boliviano, Bolivia tiene derecho a jugar en la altura y su casa es el Hernando Siles, y cualquier equipo que venga a jugar con Bolivia tiene que ir al Hernando Siles”, enfatizó en una entrevista concedida al programa FM Bolívar.
“Hoy en día lo hemos matado al Siles de un plumazo, para qué sirve el Siles ahora si vamos a jugar en El Alto. Y después si nos ganan en El Alto ya nos iremos al Huayna Potosí”, matizó en alusión a la montaña nevada que está ubicada sobre la Cordillera Real de los Andes en Bolivia.
“Estamos mostrando que nuestro argumento futbolístico es la altura, que 400 metros entre el Siles y El Alto pueden hacer la diferencia y eso no es así. No es el tema de la altura, el tema es el fútbol”.
En el Hernando Siles Bolivia jugó una parte del Campeonato Sudamericano de 1963, su único título a nivel de selecciones.
En ese escenario también fue subcampeona de la Copa América de 1997.
“Le debemos mucho al Siles, es nuestra casa, es el testigo de grandes gestas del fútbol boliviano desde el 63, el 93, el 97 y tantas ediciones de Copa Libertadores que vivimos ahí”.
Bolívar jugó “con 63 mil personas en el Siles” y también recordó el impresionante lleno para un juego de la selección frente a Hungría por las eliminatorias para el Mundial de Argentina 78.
“Le han faltado el respeto al Siles, para mí es una muy mala decisión”, finalizó.