Guabirá consiguió un buen triunfo sobre uno de los líderes, el valluno Palmaflor (3-0), dejó el último lugar de la tabla del Grupo A e hizo renacer su chance —que depende de un milagro— para pelear por ser cuarto y avanzar a la siguiente ronda del torneo Apertura de la División Profesional, este martes por la noche en el estadio Gilberto Parada de Montero.
Un “gol de camarín”, convertido por Luis Enrique Hurtado a los 2 minutos, abrió la senda de la victoria, que el azucarero la consolidó en la recta final mediante Gustavo Peredo a los 80 y David Robles a los 90, aunque el score pudo haber sido incluso más amplio por todas las ocasiones que tuvo sobre todo en el segundo tiempo.
Guabirá llegó a 15 puntos, abandonó a Real Santa Cruz (12) en la “cola” y quedó a 3 del cuarto lugar —lo máximo que podría alcanzar— que por ahora está en poder de Nacional (18), aunque con mucha más chance aparecen el propio cuadro potosino, Aurora (17) e incluso U de Sucre (15), todos con un partido menos.
El azucarero consiguió su segundo triunfo al hilo, ratificando su recuperación futbolística, aunque tardía porque antes de vencer a Royal Pari y Palmaflor dejó ir puntos valiosos que redujeron a la mínima expresión sus posibilidades.
El partido y los goles
La defensa valluna no pudo rechazar una pelota que quedó botando en su área, lo que, con una pirueta, aprovechó Hurtado para, con el pie izquierdo, mandar el balón al fondo del arco en el segundo minuto de juego (1-0).
Nelson Amarilla casi convierte el segundo con un potente disparo, pero el balón rebotó en el parante derecho a los 37 minutos.
La superioridad azucarera se incrementó en la segunda parte con el ingreso de Kevin Mina y sobre todo Gustavo Peredo, y las ocasiones de gol se fueron sucediendo, incluido otro tiro a uno de los postes.
Peredo hizo el segundo luego de recibir la pelota en soledad, lanzada desde la parte izquierda, y definió bien ante la salida del golero William Torres.
Por último, a los 90 y luego de una incursión por la derecha hasta el fondo, que continuó en un centro perfecto, Robles puso el tercero y definitivo.