Cuatro derrotas en la fase de grupos y un triunfo para evitar el último lugar, son el resumen de la participación de la selección boliviana en el Campeonato Sudamericano Sub-20 de fútbol de salón, que se llevó a cabo la semana pasada en Lima, Perú.
Como consuelo, el equipo boliviano le ganó a Chile (5-2) y cerró su participación en el noveno lugar entre las 10 selecciones de Sudamérica, en el torneo organizado por la Conmebol.
Bolivia había protagonizado la peor campaña entre todas las participantes en la fase de grupos, al sufrir en el B cuatro goleadas y no sumar ninguna unidad: Colombia le ganó por 7 a 1, Uruguay se impuso por 4 a 1, Venezuela también le hizo siete (7-1) y la mayor paliza fue la que le propinó Brasil, por 11 a 0.
Chile también cerró en el último lugar de su zona (A), aunque logró empatar un partido y terminó con una unidad.
La selección boliviana inscribió a los siguientes jugadores: Jonathan Cari y Christian Cayalo (arqueros); Alejandro Maida, Ángel Reyes, Jairo Díaz, Carlos Chaina, Alejandro Medina, Jhamil Ari, Yamil Calle, Víctor Soliz, José Menacho, José Ayllón, Gustavo Áñez y Freddy Gutiérrez. El entrenador fue Carlos Borda.
En la definición por el noveno lugar hubo un detalle que no pasó desapercibido. El arquero nacional Jonathan Cari hizo tres de los cinco goles para el triunfo sobre Chile, dos lanzando la pelota desde su área aprovechando que su colega rival estaba adelantado y uno de tiro libre.
Bolivia cerró su participación con 31 goles en contra (29 de ellos en fase de grupos) y solo siete a favor.
El torneo fue ganado por Argentina, que en el último partido sometió en la final a Colombia por 4 a 2. En el tercer puesto se ubicó Brasil.
Todos los encuentros tuvieron lugar en el Polideportivo Villa El Salvador, de Lima.