Wálter Flores admitió que era riesgoso intentar conformar dos equipos competitivos, uno para el torneo Apertura boliviano y otro para la Copa Sudamericana, y pasó lo que se temía.
“Lastimosamente la planificación la hicimos con un partido que se jugó ayer (por martes) en Bolivia y hoy otro acá, tuvimos que hacer dos equipos competitivos para ambos y había el riesgo de que pase esto”, declaró.
Lo empezó a notar cuando Diego Bejarano se lesionó y tuvo que realizar un cambio que no estaba en planes.
“Nadie se esperaba que tenga una lesión a los 15 minutos, tratamos de mantener la estructura de juego poniendo a Erwin Saavedra por derecha y metiendo al medio a (Juan) Cataldi, se dio en gran parte del partido, pero lastimosamente con el cansancio de algunos jugadores Lanús se vino con todo y aprovechó mucho el espacio que nosotros dejamos”.
“Parece que Bejarano tiene un desgarro”, sostuvo luego sobre la lesión del lateral.
Eliminación, en casa
El técnico también consideró que la despedida de la Sudamericana en los octavos de final no se dio en la goleada que recibió este miércoles en el estadio La Fortaleza, sino que fue la semana pasada en el Hernando Siles al haber ganado por poca diferencia (2-1).
“(La fase) La perdimos en casa con las chances de gol que teníamos y por la falta de concentración a la hora de marcar”, apuntó.
Misma opinión tuvo el delantero argentino Marcos Riquelme. “En este tipo de partidos, cuando cierras de visitante, hay que definirlo en nuestra casa, donde somos más fuertes, y creo que el primer partido no fue así, nos marcaron un gol y les sirvió demasiado”.
La derrota con marcador abultado dejó las peores sensaciones.
“Este partido nos deja un sabor más que amargo, es un resultado más que triste para nosotros. Arrancamos el partido de la manera como nosotros quisimos, pero rápidamente nos metieron atrás y fue cuando le dimos más espacio a Lanús para que nos hicieran los goles”, señaló Riquelme.
Bolívar se dedicará ahora exclusivamente a afrontar el campeonato boliviano, en el procurará clasificarse de nuevo a un torneo internacional.