La Federación Boliviana de Fútbol (FBF) y la Federación Sindical de Futbolistas Agremiados de Bolivia (Fabol) sostendrán una reunión decisiva este jueves en Santa Cruz, donde buscarán un acuerdo para posibilitar que el torneo de la División Profesional vuelva el viernes 9 de julio.
Aún hay discrepancias sobre el funcionamiento del Tribunal Superior de Apelación (TSA). Los futbolistas lo quieren desactivar, pero la dirigencia afirma que la única manera de hacerlo es en un Congreso Ordinario que tardaría en ser convocado almenos 60 días.
“La reunión del jueves nos parece un poco tarde, pero vamos a asistir con la buena voluntad y con la misión de que la federación entienda que el famoso TSA no puede seguir funcionando. No es legal porque deja en indefensión a los futbolistas y a los clubes. Solucionado ese tema podríamos aceptar reanudar el torneo”, dijo David Paniagua, secretario general de Fabol.
En cambio, el reclamo por las deudas está arreglado. Según la agremiación, los presidentes de los clubes deudores asumieron el compromiso de cumplir con sus obligaciones.
“Estamos firmes con la idea de hacer entender a la comisión que un torneo no puede jugarse si los actores no tienen seguridad jurídica. Los otros pendientes los podemos solucionar en la medida que exista la voluntad de hacerlo”, agregó.
La FBF asistirá con tres miembros del Comité Ejecutivo, extraoficialmente se conoció que estarán los directores Rolando Aramayo y Jaime Cornejo, además del vicepresidente Marcos Rodríguez.
“La intención es que vuelva el fútbol el día que programaron los clubes. La voluntad de la dirigencia es hacer todo lo posible para que haya fútbol, pero dentro del marco de la norma”, sostuvo Aramayo.
Si la agremiación de futbolistas da luz verde a la reanudación del torneo, el viernes jugarán en Tarija Real Tomayapo con Independiente a partir de las 19.30.