“Fue mano y penal. Nos sentimos perjudicados”, reclamó el seleccionador de Bolivia, el venezolano César Farías, sobre la jugada que su compatriota, el árbitro Alexis Herrera, dejó pasar en el primer tiempo del partido contra Colombia que terminó igualado 1 a 1, este jueves en La Paz por la novena jornada de las eliminatorias mundialistas.
El DT se mostró molesto por las decisiones del juez, en especial por la jugada que se dio a los 38 minutos, cuando luego de un tiro de esquina desde la izquierda el balón chocó en la mano del cafetero William Tesillo.
La jugada siguió con normalidad sin que Herrera solicitara la revisión del VAR.
“Ahora lo puedo hablar porque lo pude ver. La mano fue mano, una mano clara, que viene de un roce de un cabezazo de ellos y es penal, pero ni siquiera se revisó el VAR”, insistió Farías en conferencia de prensa.
Agregó que “para mí, y después de ver las imágenes, fue mano. Con la tecnología se puede ver rápido, fue mano, penal; eso modificó el partido. Desafortunadamente el no revisar el VAR no nos dio la posibilidad de tener un resultado mejor”.
‘Suspicacia’
Era una acción que se la podía aclarar con el uso de la tecnología.
“No revisar el VAR causa una situación de un partido totalmente diferente. Si lo revisas y dices que no (está bien), pero que no lo revises llena de mucha suspicacia. Todos nos sentimos perjudicados ante un escenario tan bonito como del pueblo boliviano”.
Misma opinión tuvo el guardameta Carlos Lampe, el jugador elegido para ser parte de la rueda de prensa.
“Creo que hubo mucha molestia en el entretiempo por la mano que no sancionó el árbitro, que no fue a mirar el VAR, fue clara. Fue una oportunidad importante para nosotros”.
El DT también se molestó por las jugadas que cobró el juez, ya que “condicionó” al defensor Adrián Jusino con una amarilla.
“Como en la Copa hice una queja: éramos el equipo que menos faltas hacía y más tarjetas recibía. A veces no medimos con igualdad el arbitraje, eso le dije a Alexis Herrera. El arbitraje tiene que ver con la justicia y lo que es para ambos”.
«La mano fue mano, una mano clara, que viene de un roce de un cabezazo de ellos y es penal, pero ni siquiera se revisó el VAR».
Nada que reprochar
Fuera del resultado y las decisiones del árbitro Farías sostuvo que no tiene “nada que recriminar a mis muchachos. Jugaron por dentro, por fuera. Dimos 22 tiros al arco, 36 centros, 427 pases, tuvimos 58 por ciento de posesión, siete tiros de esquina y 30 centros ante un rival importante de Sudamérica y hoy creo que nos merecíamos un poco más que el empate”.
También valoró el que sus dirigidos no se hubieran desesperado cuando estaban abajo en el marcador, y destacó el trabajo que realizaron a lo largo de los 90 minutos para igualar el compromiso.
Recuperar puntos
Fue la tercera vez que la Verde perdió unidades en casa y por ello Farías es consciente que deberá recuperarlos en los dos cotejos de visita que vienen: ante Uruguay (el domingo) y Argentina (jueves).
“Vamos con esa convicción, de que podemos hacerlo como lo hicimos en Paraguay y Chile (empates). El juego de la selección de hoy y el trabajo que hicimos da para pensar que podemos. Hubiese sido una gran chispa ganar los tres puntos”.
Lampe y sus compañeros también saben que deben sumar para no quedarse relegados en la lucha por la clasificación mundialista.
“Siempre en el fútbol el siguiente partido es el más importante. Tenemos dos partidos complicados, pero tenemos que sacar puntos en Uruguay. Somos conscientes de que regalamos dos puntos en casa y tenemos que ir a competir a Uruguay. El grupo está preparado, con mucha confianza”, apuntó.