La apuesta para masificar y darle la importancia que merece el fútbol femenino en el país está dando sus primeros pasos. Hay mucho por hacer, pero destaca el comienzo, que apunta a un crecimiento hasta su consolidación.
Una de las destacadas exponentes en Bolivia es Janeth Morón, quien este año dejó su Santa Cruz natal y, por motivos de trabajo, estableció su residencia en La Paz, donde ahora es el principal refuerzo de la Academia del Balompié Boliviano (ABB), que compite en el torneo local.
No es la única: The Strongest trajo futbolistas de Tarija, otro departamento que está a la vanguardia en el desarrollo del fútbol de damas. Asimismo, Bolívar y Always Ready también han hecho sus apuestas con el objetivo de clasificarse a la Copa Simón Bolívar y allí pelear por el título nacional, que entregará el pase a la Copa Libertadores de América 2021 (Chile, del 30 de septiembre al 16 de octubre).
Los primeros pasos serios
En diciembre del año pasado fue fundada la Asociación Boliviana de Fútbol Femenino (ABFF) con respaldo de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) para ejecutar un plan de desarrollo que también es impulsado por la FIFA y la Conmebol. Delegados de las nueve asociaciones se reunieron en Cochabamba y sentaron las bases del trabajo a fin de cumplir con las recomendaciones de las matrices internacionales.
En La Paz, también fue fundada la Asociación Femenina de Fútbol (AFFLP).
“El fútbol paceño ha subido su nivel respecto a los anteriores años, tengo la información de que los equipos están realizando un buen trabajo por mejorar. Además, ha sido el primero en comenzar su torneo local y eso muestra el interés de su nueva dirigencia”, afirma Morón sobre un certamen nuevo para ella.
Santa Cruz, Tarija y Cochabamba son los departamentos que más han avanzado. En los últimos años sus jugadoras han formado la base de todas las categorías de las selecciones nacionales. Pero La Paz viene desde atrás con fuerza y busca meterse entre los principales exponentes.
“Lamentablemente estamos acostumbrados a hacer las cosas por obligación. El comienzo está bien, pero hay mucho por hacer. Sigue habiendo deficiencias sobre todo en cuanto a la labor de los dirigentes. En el exterior las federaciones ya han creado las ligas nacionales, algo que está pendiente en Bolivia y esperamos que pronto suceda lo mismo”.
Con su experiencia en el fútbol femenino, considera que para un mayor desarrollo será importante dar más tiempo de competencia a las jugadoras y no solo torneos cortos.
Tampoco es prudente jugar un torneo nacional maratónico de una semana, porque luego eso influye a nivel internacional y se notan las diferencias. Pasó recientemente con Deportivo Trópico, que a plan de goleadas fue eliminado en primera fase de la Libertadores 2020 jugada en Argentina, después de proclamarse en Bolivia como el mejor equipo en un torneo de corta duración.
Falta apoyo
El factor económico es fundamental. Por ahora, los clubes se sostienen con el dinero que sale de los bolsillos de los dirigentes, con contadas excepciones que cuentan con auspicios o respaldo privado.
“Ninguna empresa vendrá por su cuenta, hay que hacer gestiones, hay que mendigar para recibir alguna ayuda. Hoy, los presidentes y los dueños de los equipos son los que ponen el dinero, pero no alcanza. Son pocos los que se animan a colaborar, lo hacen cuando se trata de un torneo nacional o cuando hay que jugar en el exterior”.
Las futbolistas no cobran salarios, juegan por la pasión y sus ganas de cumplir.
Morón asegura que no conoce a alguien que tenga un contrato.
“Cada jugadora pone de sus recursos para jugar, para ir a entrenar. Es más el sentimiento el que le impulsa a una para vincularse a un club. Hoy, por lo menos sería bueno recibir un viático para que ayude en algo. En todo el país la mayoría de los equipos tienen horarios especiales de trabajo porque todas las jugadoras estudian o trabajan en otros lados y luego se sacan tiempo para ir a entrenar”.
ABB trabaja cuatro veces por semana. “En mi caso, termino en mi trabajo y corro a la práctica, no voy todos los días porque en la oficina, si bien tengo un horario de entrada, no uno de salida. Algún rato una tiene que completar su trabajo y luego escaparse para estar con el equipo”.
Difícil emigrar
En 2019 dos selecciones menores jugaron campeonatos internacionales en España, fue una participación inédita para el fútbol boliviano.
La Sub 19 participó en el torneo COTIF L’Alcudia, donde el rendimiento de algunas jugadoras despertó el interés de clubes españoles que tomaron contacto para tenerlas en sus filas.
Pero la falta de apoyo en el país no permitió a muchas de ellas a cumplir el sueño de jugar en el exterior.
Si bien hubo representantes y clubes que ofrecieron las invitaciones, ellas debían cubrir los gastos de pasajes, visado y estadía de unos diez días en España para pasar un periodo de prueba.
“A mí no me corresponde dar nombres porque pienso que es un tema delicado que hay que conocerlo a fondo. Al comienzo causa mucha alegría la posibilidad de emigrar para jugar, una de mis amigas viajó con recursos propios para cumplir la prueba, pasó, fue admitida, pero a su regreso no tuvo ayuda en Bolivia para sacar a tiempo la visa. En España se cerró el libro de pases y se quedó con el consuelo de que para la próxima temporada se podría dar”.
Para ir a España se necesita como mínimo una inversión de 3.000 dólares, hay chicas que se esfuerzan y logran conseguir el dinero, pero el papeleo es largo y los clubes no están dispuestos a esperar tanto tiempo. “No es suficiente que te abran las puertas, hay mucho por hacer y todo tiene que ser con esfuerzo propio porque no hay apoyo”, se lamenta Morón.
Su historia
Janeth Morón comenzó a jugar a los 15 años en el fútbol de la capital oriental y de inmediato se destacó. Es mediocampista de creación, aunque se desenvuelve también en otras posiciones. Rápido se ganó la condición de titular y fue llamada a las selecciones nacionales.
De acuerdo con sus registros jugó torneos sudamericanos de categoría Sub 20, tres ediciones de la Copa América con la selección absoluta y apunta a estar en la edición del próximo año. A nivel de clubes disputó seis ediciones de la Libertadores. “En total son 14 convocatorias para torneos internacionales de selecciones, con 42 partidos oficiales y 14 goles”, según su recuento.
Cuenta en su carrera con 4 títulos nacionales a nivel de clubes y ahora cumple su primera temporada en el balompié paceño con la camiseta de ABB.
“Creo que ABB está avanzando por el camino correcto, ya lo demostró al ubicarse entre los cuatro mejores de la reciente Copa Simón Bolívar que se jugó en Villa Tunari. Se me presentó la oportunidad de trabajar en La Paz y con los contactos que hice en el fútbol pude acercarme al club”.
ABB apunta a llegar a la Libertadores de Chile, pero como primer paso deberá conseguir el título paceño.
Espera que la FBF cambie el formato de la Copa Simón Bolívar y que ésta tenga más duración, además con presencia de dos equipos por asociación y uno solo de uno.
En Santa Cruz, Morón jugó en Facetas Deportivas, pasó a Blooming que cambió de nombre a Mundo Futuro, Marmol Cruz y también en Deportivo Ita.
Obtuvo cuatro campeonatos nacionales con Mundo Futuro y Deportivo Ita.
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dPREMIUM
· Janeth Morón Villarroel nació en Santa Cruz, el 2 de junio de 1988. Este año reside en La Paz y por ello se vinculó a ABB.
· Su posición en el terreno de juego es de mediocampista creativa; sin embargo, también se desempeña en otras posiciones.
· Asegura que es polifuncional. Cuenta que en sus inicios jugó como arquera y después también lo hizo como delantera.