El Consejo Superior de la División Profesional definió dar por concluido el torneo Clausura, repartir los premios a través de la tabla general de 2022 y dejar sin efecto el descenso directo, que supone que en la temporada 2023 habrá 17 clubes en la máxima categoría, uno más que los 16 de la actual.
Sin embargo, la determinación establece también que en 2024 el número de participantes volverá a 16, por ello, el próximo año habrá dos descensos directos y uno indirecto.
De esa manera, debido a la imposibilidad de reprogramar las seis fechas que estaban pendientes para la finalización del Clausura, así como quedó sin efecto la declaración de un campeón, también fue “borrado” el descenso directo y solo se mantuvo un indirecto, que lo jugará el último de la tabla general, Universitario de Sucre, contra el subcampeón de la Copa Simón Bolívar.
La decisión
Los presidentes y delegados reunidos este jueves en La Paz determinaron no afectar los premios de los equipos de las asociaciones; por tanto, el campeón de la Copa Simón Bolívar 2022 ascenderá directamente a la máxima categoría, mientras que el subcampeón disputará por un cupo con U de Sucre, que se salvó de caer directamente; sin embargo, deberá defender su sitial en los partidos del indirecto.
“Se ha tomado la decisión, por motivos de fuerza mayor, de concluir el torneo Clausura 2022 para lo cual se ha complementado el artículo 34 del Reglamento y Convocatoria de la Temporada, aclarando que el último club en la tabla de posiciones acumulada jugará un indirecto para definir si se mantiene en la primera división del fútbol boliviano”, informó Fernando Costa, presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF).
Ratificó que al final de la temporada 2023, dos clubes descenderán de categoría directamente y uno jugará el indirecto.
Pérdida económica
Subir un equipo más a la categoría mayor significará una pérdida económica para cada uno de los 16 clubes actuales, de unos 36.000 dólares anuales provenientes de los derechos de televisación, que irán a cubrir la cuota correspondiente al décimo séptimo participante.
“Si bien aplica un sacrificio desde el punto de vista económico, se está ganando lograr una armonía dentro de la División Profesional, no habrá demandas ni disputas y organizaremos un torneo de 2023 con debido tiempo y en condiciones óptimas y saludable para todos”, agregó Costa.
En la próxima temporada, al ser un número impar de participantes, en cada jornada, ya sea de torneo por series o todos contra todos, siempre habrá un equipo que descanse mientras los otros 16 estén jugando.