El Tribunal Superior de Apelación (TSA) rechazó el nuevo acuerdo entre la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) y la Federación Sindical de Futbolistas Profesionales Agremiados de Bolivai (Fabol), que garantiza la reanudación del torneo 2021 de la División Profesional.
“El TSA está regido por el nuevo estatuto. Antes era Tribunal Superior de Disciplina Deportiva y ahora cambió su nombre. Depende del Estatuto y del Reglamento, y del Congreso Ordinario”, enfatizó Marcos Goytia, presidente del TSA.
Agregó que, por tanto, solo el Congreso puede determinar si cambia las atribuciones del TSA y a sus miembros.
Por tanto, si algún club apela un fallo del Tribunal de Resolución de Disputas (TRD) sobre una controversia contractual, la instancia que preside la admitirá si cumple con los pasos procedimentales.
La FBF y Fabol acordaron el jueves dejar sin efecto al TSA y volver a la nomenclatura anterior en la que solo admitía apelaciones de sanciones deportivas y daba cumplimiento a fallos de contratos.
“El Tribunal Superior de Disciplina Deportiva continuará en vigencia, ratificando por medio de resoluciones, lo actuado por el Tribunal Superior de Apelación y haciendo cumplir los fallos que se encuentran a la fecha ejecutoriados”, según el acuerdo firmado entre Fabol y la FBF.
Para la aplicación oficial de esos términos, el tema deberá ser tratado en un Comité Ejecutivo de la FBF, y éste emitir una resolución para su cumplimiento.
Pero Goytia advirtió que eso no impedirá el funcionamiento del TSA.
Según el estatuto, la composición y designación de miembros de ese tribunal debe darse en un Congreso Ordinario: dos abogados propuestos por los clubes, dos de los futbolistas en actividad y un presidente sugerido por el titular de la FBF.
Fabol observó que los actuales miembros son abogados propuestos por los clubes, lo que deja en indefensión a los futbolistas.