En los papeles previos se asomaba una lucha brava de The Strongest, esperanzado en protagonizar una hazaña, pero en la realidad fue una presa mansa de Boca Juniors, que jugando a media máquina le ganó por 3 a 0 y lo dejó eliminado de la competición internacional, este miércoles en la última fecha del Grupo C de la Copa Libertadores de América.
Con el triunfo de Barcelona sobre el brasileño Santos (3-1), al Tigre le hubiera servido un empate para saltar al menos a la Sudamericana, pero ni por asomo estuvo cerca, y más bien se libró de algo peor por decisión de Boca, que al darse cuenta de que al frente tenía un rival débil, se llamó a tregua y no presionó tanto en ataque, porque de haberlo hecho la goleada hubiera sido mayor.
Barcelona fue el sorprendente ganador de la llave con 13 puntos, seguido por Boca con 10. Ambos avanzaron a octavos de final. En el tercer lugar empataron Santos y The Strongest, con 6 cada uno, pero al brasileño le favoreció el gol diferencia (-1 contra -10) y se quedó con el cupo a Sudamericana.
Un gol y adiós
Dos errores defensivos consecutivos, uno de Gabriel Valverde y otro de José Sagredo, rechazando corto, “aportaron” a la apertura de la cuenta, un disparo de Agustín Almendra a los 3 minutos.
Tan temprano The Strongest ya iba en desventaja y no ante un gran Boca, que se tranquilizó muy temprano y manejó a placer la pelota con más del 60% de posesión y sin exigirse. Aún así, el atigrado fue muy pasivo.
El Tigre se animó un par de veces de la mano de Willie Barbosa, aunque le faltó definición. Y cuando la tuvo, a los 34 minutos, el brasileño hizo el empate, anulado por evidente posición adelantada.
A Boca le bastó despertar una vez de su letargo para hacer el segundo, a los 44. Jugada por la izquierda, centro de Edwin Cardona y gol de Sebastián Villa para el 2 a 0.
Encima, un autogol
Tras el descanso, la primera vez que presionó Boca a profundidad fue para el 3 a 0, una escapada de Villa dejando lejos a David Mateos, y un centro envenenado ocasionando el gol en contra de Gabriel Valverde a los 56 minutos.
The Strongest se pasó todo el segundo tiempo dando ventajas tanto en defensa como en ataque. Agarró en algún momento la pelota en el medio, pero adelante fue muy inofensivo, sin conseguir llevar peligro a pesar de algunas concesiones de la defensa boquense.
Lo anecdótico del encuentro fue el cambio de árbitro a los 62 minutos, por una lesión de Roberto Tobar, así que tuvo que ingresar el cuarto Nicolás Gamboa.
Boca ya no se esforzó mucho más, igual se acercó al cuarto, que hubiera sido más justo y cabal con respecto a lo sucedido en todo el encuentro.
El Tigre terminó mal, como había comenzado (derrotado en La Paz precisamente por Boca) y solo habiendo maquillado su participación con un par de victoria en La Paz, ambas insuficientes, ante Barcelona y Santos. Y no sirve de consuelo.