The Strongest arruinó su liderato en solitario a solo dos fechas del final del campeonato de la División Profesional, con un magro empate sin goles (0-0) en la casa de Tomayapo, en Tarija, lo que le hizo perder los dos puntos de diferencia a su favor que hasta la anterior fecha eran suyos, y puso en serio riesgo su chance de lograr el título.
Con las victorias previas de Always Ready e Independiente, el Tigre sabía que estaba obligado a ganar; sin embargo, fue un equipo apático en ofensiva, salvo en la recta final, cuando la papas ya le quemaban, entonces sí se animó a ir al frente a la desesperada, aunque no consiguió el gol necesario para sumar los tres puntos y tuvo que tragarse una amarga igualdad.
Ahora Always Ready y The Strongest están empatados en el primer puesto a 60 unidades, perseguidos —pisándoles los talones— por Independiente, los tres con posibilidades intactas de lograr el título.
Un candidato al título que no ataca
Si en el primer tiempo el plan atigrado era mantener su arco en cero le fue bien. Pero se esperaba más de un equipo obligado a ganar, que fuera al frente y llevara mayor volumen ofensivo al terreno de Tomayapo, además un rival accesible. No sucedió.
Lo que hizo The Strongest fue tener posesión de la pelota, de esa manera controlar el juego, pero a partir de ahí fue poco productivo de mitad de cancha para adelante.
Lo mejor —y muy escaso— en cuanto a ataque que tuvo el equipo paceño fue un disparo de Raúl Castro desde lejos, la pelota bajó de pronto y se estrelló en el travesaño. Del rebote, Willie Barbosa la tiró a cualquier parte. A los 31 minutos, esa fue la única jugada con sensación de gol.
Tomayapo fue un poco más atrevido en los primeros minutos. A los 6, Guillermo Viscarra ya fue exigido con un remate. A los 12, el arquero sacó con los puños un centro peligroso.
Poco después, el árbitro Rafael Subirana se comió un penal. En realidad, no lo vio porque el cuerpo de Jesús Sagredo no le dejó percatarse de la clara mano cometida por el lateral. Tampoco lo vio su asistente.
Un remate de Wálter Veizaga fue lo último de Tomayapo antes de que The Strongest tomara el pleno control del encuentro, que le sirvió para alejar la pelota de su arco, aunque no para acercarla al de enfrente.
En medio de eso, un error de Adrián Jusino al dejar pasar el balón tras un pelotazo, provocó que Viscarra tuviera que salir apurado, golpear la pelota con los puños y atropellar a la vez a Veizaga. Evidentemente no fue penal, a pesar de que el equipo tarijeño lo reclamó.
Rolando Blackburn apenas cabeceó una vez, desviado, un centro de uno de los Sagredo. De verdad fue poco lo que hizo en ataque el conjunto stronguista.
A la desesperada
The Strongest siguió dominando en el segundo tiempo, mucho más que en el primero, pero de nuevo su volumen ofensivo fue pobre por largo rato, quizás porque, en este caso, Tomayapo se metió más en su campo para defenderse.
Entonces el Tigre se topó con una muralla y le costó más ser profundo. En el medio tuvo poco juego y adelante sus rivales no recibían la pelota.
A partir de los 70 minutos empezó a presionar, apurado porque el tiempo comenzaba a jugar en su contra. Entonces comenzó a tener sus chances más claras con jugadores más ofensivos llegados desde el banco.
Una la protagonizaron dos hombres de recambio: lanzó Rudy Cardozo y logró cachetear Jair Reinoso en el centro del área, pero la pelota se fue alta.
Después, el mismo Cardozo dio un toquecito corto para Jesús Sagredo, cuyo zurdazo fue muy cruzado.
Encima, el Tigre perdió a Jaime Arrascaita, expulsado por agresión a un rival.
En medio de la desesperación porque el triunfo no llegaba, el equipo atigrado tuvo un par más de opciones y de nuevo no consiguió convertir, un córner cerrado de Cardozo y un cabezazo de Jusino afuera.
Si The Strongest no es campeón le va a pesar en el alma no haber ganado, por propia inoperancia, este partido que era clave para llegar con mayor tranquilidad a los últimos dos.