El Bayern de Múnich alemán se proclamó por segunda vez campeón de la Copa Mundial de Clubes de la FIFA, este jueves tras derrotar al mexicano Tigres por 1 a 0 en la final disputada en Doga, Qatar.
Lo hizo siete años después de su primer éxito en 2013 con la actual modalidad del certamen, tras los dos títulos conseguidos cuando se jugaba solo la Copa Intercontinental entre los ganadores de la Champions y la Libertadores de América.
El conjunto alemán conquistó en una sola temporada los seis trofeos posibles: la Bundesliga, la Copa, la Champions, la Supercopa alemana y europea y el Mundial de Clubes, igualando lo que antes, en 2009, había hecho el Barcelona español.
Un solitario gol de Benjamín Pavard en el minuto 59 le dio la victoria al campeón europeo, que fue superior sobre el monarca de la Concacaf en el encuentro por el título.
El Bayern fue dominante desde el comienzo y a los 18 minutos convirtió un gol, tras un remate de Joshua Kimmich; sin embargo, el videoarbitraje (VAR) analizó la jugada y concluyó que el delantero Robert Lewandowski había interferido en la línea de visión del guardameta Nahuel Guzmán, por lo que anuló la conquista.
La superioridad alemana siguió y Kingsley Coman se abrió paso con astucia desde la izquierda, obligando a Guzmán a realizar una notable atajada.
El arquero de Tigres siguió teniendo trabajo y respondió bien a los ataques.
En el segundo tiempo, luego de un centro desde la derecha de Kimmich, Lewandowski cabeceó antes que Guzmán llegara a la pelota, entonces la pelota le quedó a Pavard, quien puso el 1 a 0.
El gol fue dictaminado en fuera de juego al principio, pero tras un chequeo del VAR se confirmó que era válido.
Tigres nunca se rindió y Andre-Pierre Gignac, el goleador del equipo mexicano con tres tantos, estuvo cerca de conectar luego de un toque de Javier Aquino.
Fotos: FIFA