Integrantes del plantel de The Strongest toman con calma la posibilidad de conseguir el título del torneo “todos contra todos” con antelación. No se confían de la diferencia que han logrado sobre sus escoltas en la tabla de posiciones y mantienen la posición de que para ellos cada partido es una final.
“Nadie gana los partidos por anticipado, nos enfocamos en nosotros y en sumar siempre sin relajarnos”, dijo el técnico Pablo Cabanillas sobre el camino casi allanado que tiene el Tigre para coronarse en la temporada después de intentarlo seguido durante siete años.
The Strongest fue campeón por última vez en 2016; luego de ello obtuvo varios subcampeonatos.
“El primer objetivo cuando asumí la dirección técnica era ganar seis puntos para mantener la diferencia sobre los escoltas. Lo conseguimos y con los jugadores dijimos que había que avanzar partido a partido, jugar con confianza y sin relajarnos”, declaró Cabanillas a PREMIUM.
Buena diferencia
El Tigre se impuso el sábado a Aurora (0-3) en Cochabamba, a la vez que Bolívar no pasó del empate en su visita a FC Universitario (2-2) en Quillacollo, de manera que la diferencia a favor del líder se amplió de seis a ocho puntos.
The Strongest (56 unidades) podría ser campeón por anticipado si, por ejemplo, gana sus tres próximos partidos: contra Guabirá en Montero, frente a Gran Mamoré en La Paz y ante Vaca Diez en Cobija; de esa manera llegaría a 65 puntos, inalcanzable para Bolívar, que solo podría hacer un máximo de 63, y también para Always Ready (un tope de 64).
“No se gana por anticipado. Primero pensamos en el partido del martes contra Guabirá, luego hacernos fuertes en casa con Libertad Gran Mamoré y luego ver qué pasa. A esta altura del torneo uno ve, escucha y también analiza los partidos de los otros equipos”, admitió.
«Estamos unidos»
Uno de los factores preponderantes para el buen momento atigrado es la unidad de la plantilla, según destacó el DT. “Trabajamos semana a semana la parte mental, tener un buen grupo es fundamental para que en la cancha se vea esa unión; cuando hay buenos lazos en relaciones interpersonales adentro se percibe esa diferencia y desde afuera todos notan que estamos unidos; también controlamos la ansiedad para no caer en debilidades mentales”, manifestó.
La próxima “final” para el Tigre será el martes en Montero ante Guabirá, que está en zona de descenso.
“El que está abajo tiene motivación profunda y tiene que ver con la supervivencia. Muchas veces sale a hacer su mejor partido, rinde mejor y por eso hay que tomar recaudos. Eso sí, en Montero iremos por las tres unidades”.
El plantel cerró sus entrenamientos este lunes por la tarde en Santa Cruz, adonde se trasladó el domingo directamente desde Cochabamba.