La piscina de la Villa Deportiva Abraham Telchi no estará lista a tiempo, por ello la sede del Sudamericano Juvenil de natación, que debía llevarse a cabo en Santa Cruz, fue trasladada a Lima, Perú, en noviembre.
Bolivia iba a albergar un evento de esta magnitud por primera vez en su historia con las cinco disciplinas: natación carreras, aguas abiertas, polo acuático, clavados y natación artística (anteriormente conocida como nado sincronizado). Estaba programado para desarrollarse del 31 de octubre al 14 de
“La Confederación Sudamericana de Natación (Consanat), por este medio informa que en vista a la imposibilidad de la Federación Boliviana de Natación (Febona) de organizar el Campeonato Sudamericano Juvenil de Deportes Acuáticos 2021, y ante el ofrecimiento de la Federación Deportiva Peruana de Natación (FDPN) para ser sede de dicho Campeonato, la Consanat confirma la realización de este Sudamericano en la Ciudad de Lima, Perú”, según el comunicado de la entidad internacional.
A falta de la confirmación oficial de la Consanat las nuevas fechas son del 6 al 14 de noviembre.
¿Qué pasó?
Pedro Cervantes, presidente de la Febona, explicó que el escenario elegido para albergar el evento no estará listo para las fechas estipuladas, faltando “muchos aspectos” para que sea avalado internacionalmente.
“A la piscina le falta la instalación de gas para los calderos. En cuanto a equipamiento no tiene todos los sistemas de control electrónico, es decir, tablero, consolas, paneles para natación, la cancha de waterpolo, las bocinas bajo el agua para la natación artística, entre otros”, detalló.
El reducto debía ser remodelado y reinaugurado con el Sudamericano, pero los avances no fueron los previstos.
En cambio, la organización estaba lista para recibir a más de 1.000 personas.
“Ya se tenía avanzado el tema del hotel COVID-19, el protocolo sanitario para el ingreso y salida de los deportistas del territorio nacional. Teníamos los planes de contingencia en cuanto a posibles casos positivos. También gestionamos la llegada de los jueces, que no tenemos en Bolivia en clavados, waterpolo y artística. Iban a llegar con su hotel y alimentación gratuita, al igual que su transporte. Prácticamente lo teníamos todo”.
Tres opciones
La Febona planteó tres opciones para mantener la sede: reprogramar el evento para marzo de 2022 en Santa Cruz, cambiar la sede a Cochabamba para las fechas que en principio estaban estipuladas o que el torneo se realice en otro país.
“Las federaciones dijeron que iba a ser complicado postergar para marzo porque ya lo tenían todo planificado. En el aspecto técnico no veían conveniente cambiarlo porque todos se prepararon para competir en esas fechas y un cambio de cuatro o cinco meses significaba un replanteo de su preparación, así que no aceptaron”.
“Tampoco aceptaron por la altura (ir a Cochabamba). Dijeron que es complicado para sus deportistas, además que no se prepararon para una aclimatación y ello impediría su buen desempeño”.
Ante esta situación solo quedó la última opción con el cambio de sede, es decir, que Lima albergue el evento, lo que al final aceptaron.
Torneos en 2022
Como Bolivia aceptó el cambio de sede considerando el interés deportivo de los nadadores y mantener las fechas programadas, las federaciones cedieron sus localías de la Copa Pacífico para que se lleven adelante en Bolivia el próximo año.
“Colombia debía albergar la natación carreras y clavados, Chile tenía que recibir el waterpolo y Ecuador era anfitrión de las aguas abiertas, pero todos nos dieron la organización”, apuntó Cervantes.
Sobre la posibilidad de ser sede en el Sudamericano Juvenil de 2023, “todo dependerá de cómo vayan las obras allá (en Argentina, sede original) porque para ese torneo se tiene que construir un centro deportivo, así que en Lima sabremos sobre ello y veremos si podremos albergar o no el campeonato”.