Bolivia se ganó de entrada la chapa como “la peor selección” de la Copa América por la pobre imagen que dejó en su debut, este domingo en el AT&T Stadium de Arlingtone, Texas, donde cayó ante Estados Unidos (2-0) en el inicio del Grupo C.
Débil y limitada de mitad de cancha para atrás, de labor casi nula en ataque, la Verde —que jugó de rojo entero— fue superada por la anfitriona que, sin ser gran cosa, le bastó con presionar, jugar con velocidad y hacer valer la jerarquía de sus jugadores para, en los momentos justos, hacer la diferencia.
Guillermo Viscarra fue lo mejor de Bolivia, si no hubieran sido sus atajadas el score en contra sería mayor. Hubo esfuerzo de varios jugadores, por ejemplo, de Roberto Carlos Fernández, pero no fue suficiente.
El técnico Antonio Carlos Zago apostó por una formación inédita, aparentemente tratando de fortalecer las líneas para defender, pero sin “cerebro” por la sorpresiva ausencia de Ramiro Vaca, y con dos delanteros completamente desconectados.
Estados Unidos hizo un gol al comienzo y otro cerca del final del primer tiempo. Fue lo justo, más allá de que, en la segunda parte, estuvo cerca de otros más.
Desde el comienzo
A los 30 segundos, el golero boliviano ya había rechazado dos veces la pelota, en la segunda evitó el gol, sin embargo, la resistencia nacional no fue más allá porque a los 3 minutos, Estados Unidos logró el 1 a 0 con una definición de Pulisic, quien recibió la pelota desde un lanzamiento de esquina y tiró hacia la izquierda para luego festejar.
Bolivia tuvo el peor comienzo de la mano de un endeble sistema defensivo. El capitán estadounidense no había sido presionado y definió con absoluta tranquilidad.
Viscarra tuvo que esforzarse un par de veces más para impedir la llegada del segundo. A la Verde —vestida de rojo— le costaba marcar, recién pudo respirar un poco cuando Estados Unidos dejó de apretar el acelerador y optó porque el partido ingresara en un pozo.
No hubo reacción boliviana, que de mitad de cancha para adelante no hacía nada. Allá andaban desconectados los delanteros Bruno Miranda y César Menacho, sin que nadie del medio les pase una pelota decente.
Los marcadores nacionales en el medio la pasaron sufriendo. Leonel Justiniano vio la primera amarilla por cometer una falta desde atrás.
Cuando Estados Unidos se decidió a cambiar el ritmo y buscar profundidad, volvieron a emerger los problemas nacionales para evitarlo.
El 2 a 0 llegó a los 43’, Pulisic se hizo cargo de una asistencia, mientras que Balogun tuvo todo el tiempo del mundo para, dentro del área, pensar y definir lejos del alcance de Viscarra.
Cambios inútiles
Zago hizo tres cambios de entrada para la segunda mitad: ingresaron Héctor Cuéllar por Diego Medina, Miguel Terceros por Justiniano y Rodrigo Ramallo por Menacho. En los primeros minutos desde la reanudación, Bolivia pareció mejorar, un remate de Fernández y otro de Terceros dieron esa sensación.
Pero luego volvió lo de antes, la imposibilidad de construir alguna buena jugada de mitad de cancha hacia adelante. La selección de Zago otra vez se mostró inofensiva.
Estados Unidos hizo un tercer tanto a los 52’, sin embargo, fue anulado por posición adelantada.
De ahí en adelante, la selección anfitriona cobró protagonismo en ataque, a la vez que Viscarra de nuevo salvó lo que pudo ser otro gol.
El siguiente cambio en Bolivia fue el ingreso de Carmelo Algarañaz por Miranda, que tampoco influyó para nada.
La selección dueña de casa continuó ganando terreno en el sector boliviano y generando ataques. Fernández destacó bastante en la marca como también lo hizo Gabriel Villamil.
Para jugar los últimos 20 minutos entró Ramiro Vaca, pero ante el dominio estadounidense tocó muy poco la pelota.
Viscarra tuvo una notable triple intervención en el final y sus grandes reflejos evitaron, una vez más, otro gol.