La clara e indiscutible victoria de Bolívar en la cancha de Blooming (0-5) tuvo un común denominador pocas veces visto, porque los tres primeros goles fueron por la vía del penal, este domingo en el estadio Tahuichi Aguilera de Santa Cruz por la quinta jornada del torneo “todos contra todos” de la División Profesional.
Una falta de Gabriel Valverde sobre Nicolás Ferreyra, y dos manos, una de César Romero y otra de Jorge Lovera, todas las acciones dentro del área, dieron pie al trío de penas máximas y a los goles de Ronnie Fernández en dos ocasiones y de Ramiro Vaca.
Los otros dos tantos, que no fueron desde los 12 pasos, los hicieron Vaca el cuarto y el chileno Fernández el quinto.
La Academia llegó a su cuarta victoria en cinco fechas y, con 12 puntos, sigue la estela del líder The Strongest (15); en cambio, el cruceño Blooming sufrió su cuarta derrota y con solo una unidad continúa en el penúltimo lugar de la tabla.
Pocos minutos de juego
La primera parte fue muy detenida, aunque fue indudable la superioridad que Bolívar mostró desde el comienzo, volcado a presionar en ataque ante un Blooming sin ideas para salir y metido en su zona para defenderse.
Vaca casi hace el primero con un lanzamiento de tiro libre, la pelota pegó en el travesaño.
En otro ataque académico, el árbitro Hostin Prado cobró falta de Ferreyra en contra de Valverde; sin embargo, el VAR le hizo notar que fue al revés; entonces, revisó su primera decisión y cobró el primer penal de la noche, anotado a los 33 minutos por Fernández con un tiro bien colocado.
Para colmo de males para el conjunto local, la expulsión con roja directa por un manotazo de Daniel Camacho sobre Diego Bejarano lo dejó con 10 hombres.
Bolívar encontró un nuevo penal por mano de Romero, y de nuevo el chileno Fernández anotó a los 43’, con una definición muy parecida a la anterior.
Con el paceño jugando a placer llegó un tercer tanto, muy bonito por cómo fue concebido, sin embargo, fue anulado debido a una posición adelantada detectada por la tecnología.
La goleada
Blooming había cerrado el primer tiempo atacando y llegando con peligro al área de Carlos Lampe un par de veces, aunque le faltó convertir.
Al regresar a la segunda parte tuvo la mala suerte de cometer otra mano en su área, esta vez de Lovera, entonces la pena máxima la cambió Vaca por el tercer gol a los 51 minutos con un tiro que engañó al golero Braulio Uraezaña.
Con el partido liquidado, sin posibilidades de una reacción bloominista, cada que se lo proponía la Academia generaba zozobra en el área local.
El cuarto tanto, a los 72 minutos, fue de Vaca, a pase de Roberto Carlos Fernández luego de un rechazo del golero ante un tiro de Patricio Rodríguez, quien había saltado a la cancha poco antes.
El mismo Rodríguez estrelló la pelota en el palo a los 84’. Pudo ser el quinto.
Hasta que el quinto y definitivo (0-5) llegó a los 91 minutos a partir de un buen toque de Tonino Melgar para Fernández, quien empujó el balón ante la salida del arquero.