La Copa Santa Cruz, un trofeo destinado al ganador del primer clásico cruceño del año, de corte amistoso, se la llevó Blooming, que derrotó a Oriente Petrolero (2-1) el domingo a estadio lleno en el Ramón Tahuichi Aguilera de Santa Cruz.
Para el albiverde fue un juego accidentado por las lesiones que sufrieron algunos de sus jugadores, con especial atención a Diego Bejarano, quien tuvo que dejar la cancha muy temprano.
El exfutbolista de Bolívar pisó mal a los 7’ y, por una dolencia en la rodilla, no pudo seguir, incluso fue transportado en una ambulancia para su atención inmediata en una clínica.
Blooming empezó de la mejor manera con el gol de Richet Gómez a los 2 minutos. Temprano, el celeste se puso arriba en el score.
El empate de Marcos Riquelme llegó a los 29’ acompañado de otra mala noticia, porque el delantero sufrió molestias musculares y tampoco pudo continuar en el partido.
Ramiro Eguez, a los 78 minutos, convirtió el segundo y definitivo para alegría de la afición celeste.