Arturo López cumple 89 años. Fue el arquero de la selección de Bolivia campeona sudamericana en 1963. A sus casi 90 es uno de los siete futbolistas de ese recordado plantel de 22 que aún están con vida. Los otros ya partieron.
“Se me ve bien, gracias, pero tengo muchos problemas de salud, estamos combatiendo”, dice.
Nació en Camiri el 20 de mayo de 1935. Fue jugador de Chaco Petrolero y también entrenador en la mejor época del club de YPFB, la entidad en la que también prestó servicios en diferentes cargos.
“En esa época no se podía ser solo jugador, había que trabajar y nosotros (los futbolistas) en especial nos dedicábamos en mi caso a Yacimientos y en otros a la banca”.
Radicó durante muchos años en La Paz. Era hombre de la zona de Miraflores, ahí detrás del cerro Laikacota, que ahora es un mirador. En la actualidad vive en Cochabamba.
Su Chaco Petrolero
Hace algo más de un mes, al recordar otro año del título del Sudamericano de 1963, el periodista valluno Óscar Galdo entrevistó a Arturo López. De uno de los temas que hablaron fue del club de toda su vida, Chaco Petrolero.
“Hace años que mi Chaco desapareció de las justas del fútbol profesional. Cómo no me voy a acordar, fue donde yo comencé a jugar en 1954, empecé en ascenso hasta llegar a Primera y ser campeón”.
Con ese club paceño, que hoy está en la Asociación de Fútbol de La Paz (AFLP), fue campeón como jugador y también como entrenador.
Como futbolista dio la vuelta olímpica en 1962 a nivel paceño y como DT, conquistó en 1970 el único título nacional ganado por Chaco.
“Éramos todos nacionales en esa época, el único que era extranjero era Eulogio (Vargas), hicimos una buena campaña, salimos campeones en La Paz y luego yo dejé de jugar en Chaco y pasé a Bolívar un par de años, el 66 y 67, me fue bien también. Jugué en Bolívar en la Copa y luego retorné a Chaco para dirigir”.
Se retiró del fútbol activo a sus 32 años, “no quise seguir jugando tenía muchos problemas, me dediqué a la dirección técnica y salimos campeones nacionales”.
También fue DT de Chaco en la primera época de la Liga del Fútbol Profesional Boliviano.
Campeón sudamericano
Fue arquero de la Verde en 1963, cuando Bolivia conquistó el título. Jugó los seis partidos que llevaron a la selección a su único logro internacional en la historia.
“El Willy (Camacho) y yo jugamos todos los partidos, Danilo (Alvim, el técnico) no nos cambió nunca, no sé por qué. A los demás los cambiaba, a nosotros no”.
Bolivia empezó a los tropiezos ese campeonato al empatar con Ecuador. “Nos quería matar la gente porque no jugamos bien”. En los siguientes partidos fue mejorando hasta conseguir la corona, sobre todo después de sendas victorias sobre las favoritas Argentina y Brasil.
“Sea como sea hemos salido campeones, nadie tiene que desvalorizar nada, fue un gran título y hasta hoy es el único que tiene Bolivia, ganamos y va a quedar para siempre en el recuerdo”.
Su memoria casi no falla, aunque los años han pasado. Si fuera de fútbol continuaría hablando horas de horas: “Uno se acuerda con el tiempo de todo, también de cosas que ha hecho mal o que no ha hecho. La vida es así, no sé si voy a poder dormir después de tantos recuerdos”.