Un total de 250 árbitros y árbitros asistentes del país se someten esta semana a pruebas físicas, cuyos resultados determinarán quiénes quedan habilitados para dirigir los partidos de la División Profesional.
La actividad es organizada por la Comisión Superior de Árbitros y la Dirección de Arbitraje de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF). Los convocados son de categorías FIFA y Primera.
“Cumplir con esta exigencia es un requisito indispensable para dirigir en la División Profesional. Estamos realizando pruebas físicas exigentes solicitadas por la FIFA y la Conmebol”, informó Pedro Saucedo, presidente de la Comisión Superior de Árbitros.
El preparador físico Rolando Vaca está a cargo de tomar las pruebas Yo-yo, que consisten en carreras entre dos puntos separados por una distancia de 20 metros, aumentando la intensidad del ritmo. Los niveles más altos pueden aguantar corriendo durante más tiempo a intensidades elevadas.
El otro test es el Ariet, un método aprobado por la FIFA para examinar la capacidad aeróbica de los asistentes.
La labor comenzó el lunes con los árbitros y asistentes de Cochabamba y Tarija, siguió el martes para los de Oruro y La Paz, el miércoles fue para los de Sucre y Potosí, el jueves será para los de Santa Cruz y se cerrará el viernes con los de Beni.