El Centro de Entrenamiento y Alto Performance de Ananta (al sur de La Paz), tiene un avance general de obra de un 50%, y destaca la cancha B, que está casi lista y será la primera en ser entregada, probablemente a mediados de marzo para que el primer plantel de Bolívar ya pueda entrenar en ella.
Un césped argentino adorna la plataforma, fue sembrado sobre una arena especial, tiene un sistema de riego automático y el drenaje funciona a cabalidad, lo que permite que en minutos, menos de cinco, el gramado que fue mojado quede seco.
La dirigencia de Bolívar y los especialistas encargados de la obra ofrecieron un tour a la prensa el viernes por la tarde y mostraron los avances del proyecto que se lleva adelante en el marco del Plan Centenario (1925-2025).
A primera vista lo que llama más la atención en las seis hectáreas de terreno es el edificio de 2.168 metros cuadrados en el que el primer plantel, la Pre Profesional y el equipo femenino dispondrán de todas las condiciones para sus entrenamientos.
También resalta la cancha B, mientras que la A y la C están en pleno proceso de trabajo.
“Al momento estamos llegando a un 48 o 50 por ciento (del trabajo), tomando en cuenta que el bloque es lo que jala más la inversión”, dijo Rodrigo Urzagaste, responsable de la obra.
En el caso de la cancha con mayor avance, “estamos proyectando habilitarla a mediados de marzo, pero dependerá de muchos factores como la planta, porque es un ser vivo”, apuntó Urzagaste.
De calidad
El césped sembrado es Ray Grass y proviene de Argentina, es apto para el clima frío que predomina en La Paz.
Fue colocado encima de la arena Top Soil, que da muchas facilidades para el drenaje del agua.
“La cancha tiene un poco más de sembrado. Esta sobre arena Top Soil y tiene un sistema especial de drenaje, que nos sirve porque si se lo riega o llueve a los pocos minutos el equipo ya puede estar entrenando”, explicó Luis Miguel del Castillo, responsable del área.
Según detalló Fernando Ibargüen, director comercial del club, “hubo una ocasión en la que se juntó un poco de agua en un sector, pero a los cuatro minutos ya estaba bien, es porque el drenaje es muy rápido”.
Del Castillo dio más detalles. “Se lo corta de forma inter diaria. Estamos cortando a una pulgada, o sea 25 milímetros. Lo normal, cuando el equipo comience a entrenar, será de 17 o 19 milímetros, según lo que pida el profesor”.
Las demás entregas
Por el ritmo de ejecución en toda la obra hay tiempos que se manejan para la entrega completa.
“Los avances en la obra gruesa del bloque principal están en un 85 por ciento de ejecución. La siguiente semana vamos a entrar en lo que es obra fina y acabados. En el campo A estamos ejecutando todo lo que es el sistema de drenaje y de forma paralela en algunos sectores rellenamos con el material previo a la siembra. Esperamos que esté en estas condiciones (como la B) hasta fines de mayo; y en el caso de la C, está proyectada para fines de agosto, que es la fecha final para terminar todo”, recalcó Urzagaste.
El edificio tendrá dos pisos con diferentes áreas: vestuarios para el primer equipo, el pre profesional y los cuerpos técnicos, salas de fisioterapia, gimnasios, sala de hiperoxia y metabolismo, baños, área de recuperación, comedor principal, cocina, almacenes, oficinas deportivas y de administración, además de una sala de reuniones.
A pesar de ser un Centro para la práctica de la Academia, Ibargüen aclaró que estará a disposición del fútbol boliviano y que incluso se piensa dar la cancha de césped sintético C para diferentes torneos.
“Esto no solo es para el bolivarismo, sino para el fútbol nacional. Ojalá la selección pueda venir y disfrutar de todo lo que vamos a tener. La cancha de césped sintético está pensada para recibir partidos oficiales porque hemos vivido en el fútbol femenino y otras categorías que no hay canchas para hacer campeonatos estables. Queremos ponerla a disposición para los torneos de la Asociación (de Fútbol de La Paz)”.
Tembladerani
El dirigente también se refirió al estadio Libertador Simón Bolívar y aseguró que si no se presentan inconvenientes, a fines de abril comenzará con la demolición.
“Tenemos que avanzar en el proyecto de Tembladerani, que requiere obras, trabajo de suelos, demoliciones, ya vamos a tener que prescindir de ese lugar. Estamos esperando porque hay muchos trámites que se deben hacer con la alcaldía, permisos que se deben aprobar. Si todo va bien para fines de abril estaríamos cerrando Tembladerani definitivamente”.
El primer plantel trabajará nuevamente en ese reducto dentro de unas dos semanas, pues “por la época de lluvias y unos químicos se dañó gran parte del césped”, por lo que ha sido necesario someterlo a una reparación.