Juan Carlos Arce finalizó su contrato con Blooming. Dos temporadas después de haber defendido esa camiseta, el notable delantero se despidió este martes del celeste cruceño. El día anterior, el club había adelantado el final de la relación.
En abril próximo Arce —de notable trayectoria en clubes de Bolivia y el exterior, y en la selección nacional— cumplirá 40 años. Antes de que inicie la nueva temporada no se sabe si todavía seguirá en actividad o su decisión es la de retirarse.
El futbolista, que debutó en filas de Oriente Petrolero hace 21 años, firmó una linda carrera que lo llevó también a jugar en clubes de Brasil, entre otros el famoso Corinthians, además de ir a territorios lejanos como Catar, Corea del Sur y Rusia para volver en un gran momento a ser figura en Bolívar, el club que más tiempo defendió de manera consecutiva.
Su décimo club
Blooming fue el décimo club de su carrera. La divisa de Oriente se puso en más de una ocasión. En Bolivia también jugó para Always Ready, pero sus mayores triunfos fueron con la Academia durante casi 10 años.
Más clubes lo tuvieron en el exterior, porque en Brasil, aparte del Corinthians, jugó también para Portuguesa y el Sport Recife. En Catar lució la camiseta del Al Arabi SC; en Corea del Sur, la del Seongnam Ilhwa, mientras que en Rusia su equipo fue el Terk Grozny.
La despedida
“Hoy cierro un capítulo muy especial en mi carrera, uno lleno de desafíos, aprendizajes y momentos inolvidables”, escribió Arce en las redes sociales.
Recordó: “Llegamos al club en un momento complicado, movido únicamente por el amor que siento por esta camiseta y juntos logramos superar adversidades y alcanzar un sueño: devolver a Blooming a la competencia internacional”.
Luego agradeció “a cada cuerpo técnico, a mis compañeros, al staff del club, y a todos los que fueron parte de este camino. Pero, sobre todo, mi eterno agradecimiento a la hinchada celeste. Ustedes nunca dejaron de alentar, en las buenas y en las malas, siempre estuvieron ahí demostrando que Blooming es mucho más que un club. Los llevaré siempre en mi corazón. Gracias por abrirme las puertas y permitirme defender estos colores con orgullo. ¡Gracias Blooming!”, cerró.