Bolívar celebra su Centenario. La Academia cumple 100 años de vida institucional este sábado 12 de abril (1925-2025). Es el club de fútbol más exitoso del país. Un gigante.
Fernando Diez de Medina, laureado escritor y poeta boliviano, famoso hincha celeste (murió en 1990), escribió en abril de 1975 el texto “Apología Lírica del Bolívar Legendario” e hizo y quedó para siempre una frase suya: “Yo digo ¡Bolívar! y siento que se me aclara el alma”.
En esa su obra contó que el club nació “al calor de la amistad y el entusiasmo. Pobre, modestísimo, en una casa de la calle Junín. Unos pusieron contados pesos y otros solo centavos. (Carlos) Terán dio su casa. El primer presidente provisional fue Humberto Bonifacio. Era en abril de 1925. Será justo evocar a los fundadores. La primera Mesa Directiva la preside Carlos Terán y lo acompañan Ernesto Sainz, Héctor Salcedo, Rafael Navarro y Felipe Gutiérrez. El primer equipo de ese año estaba formado por Wálter Miranda, Enrique Tellería, Felipe Gutiérrez, Nieto, Víctor Lecrere, Carlos Terán, Germán Garnica, Roberto Segaline, Miguel Carreón, Luis Ernesto Sainz, siendo su capitán Humberto Barreda”.

Bolívar comenzó su actividad futbolística en el amateurismo en 1927. A partir de ahí no paró nunca y fue creciendo hasta convertirse en la gran entidad de ahora.
Tuvo grandes jugadores a partir de Mario Alborta. Años después llegaría El Maestro Víctor Agustín Ugarte. Hay un montón de nombres de notables que le dieron fuerza al equipo y lo condujeron a muchas victorias.
Fue campeón seis veces del amateurismo paceño entre 1932 y 1942, y subcampeón en ocho ocasiones de 1927 a 1949.
En 1964 sufrió su peor derrota deportiva al irse al descenso en el fútbol paceño. Ese momento fue una bisagra. Al volver fue campeón del profesionalismo paceño entre 1966 y 1976, seis veces en total.
Y luego, en la Liga y la División Profesional hasta la actualidad, ganó 31 títulos bolivianos, fue subcampeón una vez de la Copa Sudamericana y cuartofinalista de la Libertadores de América.
Así como por sus filas pasaron los mejores jugadores del fútbol boliviano, también tuvo y aun tiene, notables dirigentes que llevaron al club a ser número uno en el país.
Lauro Ocampo Crespo fue “el padre” de los bolivaristas. Mario Mercado, el gran presidente que hizo obras magníficas como el estadio de Tembladerani y el Gran Centro de Obrajes.
Bolívar ha sido un incansable ganador de coronas y el equipo al que han llegado los mejores jugadores.
Los tiempos han cambiado y hoy vive una transformación de la mano de Marcelo Claure, otro gran impulsor que tomó la decisión de modernizar al club en un intento para volverlo autosostenible y que ya no dependa de nadie.
Ya no existe el Gran Centro, pero en su lugar fue construido un edificio; el viejo estadio de Tembladerani fue demolido y ahí se levanta un nuevo y moderno escenario.
Hace un tiempo estrenó un Centro de Alto Rendimiento que lleva el nombre de Guido Loayza, único en el país y uno de los mejores en Sudamérica.
En Santa Cruz ya funciona la Academia City que es un plan ambicioso para formar nuevos jugadores.
Bolívar llega a sus 100 años. Aquel club que comenzó pobre, modestísimo, hoy se enorgullece por ser el mejor gracias a una fuerte dosis de éxitos deportivos e institucionales; además, realiza cambios fundamentales para empezar su año 101 con nuevos bríos.