Los jugadores de la selección boliviana recién transferidos al exterior, Roberto Carlos Fernández, quien regresó a Rusia y Lucas Chávez, en su primera incursión en Arabia Saudita, fueron presentados por sus nuevos clubes y comenzaron a entrenar.
La transferencia de ambos futbolistas de Bolívar se dio mientras estaban concentrados con la Verde para los partidos de septiembre por las eliminatorias mundialistas; una vez que completaron esa labor realizaron sus trámites personales y se marcharon del país.
Fernández defenderá la camiseta del FC Akron de Rusia, país en el que estuvo hasta mitad de temporada como jugador del FC Baltika, donde destacó y se dio a conocer, aunque su equipo descendió de categoría.
Su nuevo club publicó en redes sociales un saludo de Fernández, quien a su llegada dirigió unas palabras en ruso a los aficionados.
Este martes el técnico y sus nuevos compañeros le dieron la bienvenida. Un traductor acompaña permanentemente al futbolista boliviano para que se pueda desenvolver en el grupo.
Por su parte, Chávez fue cedido por una temporada al árabe Al-Taawon FC, también de primera división.
El club publicó unas fotos en las que se lo ve al delantero con el presidente de esa entidad luego de firmar su contrato, mientras que en el curso de esta jornada se acopló por completo a los entrenamientos con sus nuevos compañeros.
Todavía no está marcado el debut de los dos en sus nuevos equipos. En ambos casos volverán a Bolivia en octubre, cuando la selección nacional se aliste para jugar por las eliminatorias contra Colombia en El Alto y de visitante frente a Argentina.
El problema para el técnico nacional Óscar Villegas será que, a diferencia de la anterior convocatoria, solo podrá contar con ellos en los cinco días previos al primer encuentro, según norma la FIFA.