La exmarchista Geovana Irusta, multicampeona nacional y sudamericana en los 20 kilómetros, y con tres participaciones en Juegos Olímpicos, escribió un mensaje de apoyo al maratonista Héctor Garibay, quien se apresta a participar en París 2024, y pidió que “dejen en paz” al fondista a días de su prueba, programada para el sábado 10 de agosto.
La pasada semana, Garibay se desfogó mediante un extenso mensaje en las redes sociales por las diferencias con la que fue su entrenadora Nemia Coca, aunque no la mencionó, y aseguró que en el último tiempo él se dedicó a sus prácticas solo y sin apoyo.
La declaración pública del único deportista nacional clasificado por mérito propio luego de haber obtenido la marca mínima para los Juegos que se llevan a cabo en la capital francesa, mereció muchas manifestaciones de apoyo, entre ellas ahora de Irusta, una de las más destacadas atletas en la historia del país.
“Sé lo que es competir en unos Juegos Olímpicos, sé lo que es sentir el peso de nuestro pueblo en las espaldas y sé lo que opina la gente envidiosa”, empezó su mensaje Irusta, quien estuvo en Atlanta 1996, Sidney 2000 y Atenas 2004.
“Nosotros elegimos este camino”
Dio a entender que conoce de cerca las dificultades a las que Garibay se refirió: “Te dije que esto no pararía y que tú debes seguir adelante, que este camino no era fácil” porque “está lleno de sudor de sangre, también lágrimas, a veces dolor y otras también de alegría, que son pocas”.
Según Irusta, a los deportistas, a pesar del esfuerzo que ponen y del éxito que logran les toca “luchar contra malos dirigentes, autoridades que no cumplen su trabajo o gente que también se equivoca en sus apreciaciones, y a veces hasta con algún familiar” que pone trabas.
“Nosotros elegimos este camino porque tenemos las agallar para ser diferentes, tenemos el valor para enfrentarnos a las dificultades de la vida, Dios nos dotó de este talento que es duro de cargar, pero también nos llena de satisfacciones porque haces que tu país esté en lo más alto” y que “gracias a tu esfuerzo se hable de tu patria. El amor a nuestra Bolivia es tan grande que podemos seguir adelante”.
Con la experiencia que tiene por los años dedicados al deporte, Irusta le dice a Garibay que cuando un deportista está comenzando y obtiene sus primeros logros está solo, pero cuando empieza a crecer “todos se sienten con derecho a criticarte, atacarte sin saber qué comiste, si tomaste agua o tuviste que chupar el pasto por la sed”. Incluso “quizás critiquen que no estás bien vestido”, todo ello como parte de un “sueño olímpico”.
“A quien le importó cuando empezaste, que cada pasaje que cobrabas en tu taxi representaba un boliviano más para tu entrenamiento, eso hacía que hasta el cansancio se te pase y sigas adelante”.
Contra las autoridades
Garibay recordó hace días que recién cuando ganó una competencia en México obtuvo apoyo, pero también —escribió Irusta— “aparecieron los envidiosos, los figuretis como la ministra de Salud quien con inmensos cheques te buscaba para la foto”.
Asimismo, criticó a los dirigentes “que viajaron sin ningún mérito” y les pidió que “tengan sangre en la cara y no exhiban sus fotos de sus vacaciones, es muy ofensivo para nosotros” los deportistas.
Habló de “las autoridades que no hicieron nada para la preparación de Héctor”, a quienes acusó de, en cambio, ayudar “en ir y venir a la autonombrada entrenadora”, aseguró que ese tipo de actitudes deben ser investigadas, como también la falta de apoyo del gobierno que ni siquiera abanderó a la delegación que viajó a los Juegos Olímpicos.
Irusta, que desde hace tiempo saca la cara por los deportistas ante la falta de apoyo, admitió que por su nuevo mensaje probablemente sea objeto de ataques, asumió su defensa si ello sucede, pero solicitó que “dejen en paz a Héctor Garibay”, a quien le deseó “fuerza” para que pueda desarrollar una buena competencia en París.