El nuevo documental del periodista Gustavo Cortez, titulado “Lágrimas en el karting”, cuenta el fatal desenlace de una carrera improvisada en las calles de Miraflores, el 7 de mayo de 1988, que derivó en la muerte de Carlos Sanz Guerrero, quien era entonces el campeón nacional de karting.
El piloto tenía pensado viajar a Perú con sus hijas ese fin de semana, pero fue persuadido por su amigo y dirigente Carlos Aramayo para que compitiera en la carrera del domingo 8.
Ese sábado 7 era día de prácticas. Los coches empezaron a rugir en la tarde. ‘El Pollo’ Sanz Guerrero llegó sobre la hora y de inmediato se puso a reconocer el circuito e iba a unos 50 kilómetros por hora. De pronto, en la esquina Guatemala y Busch, su coche volcó, el piloto no pudo controlar la curva y se estrelló contra la pared de una casa.
Cerca de las 17.00 todo el mundo se movilizó para tratar de socorrerlo. Lo trasladaron de urgencia a la Clínica del Accidentado (plaza Uyuni), pero la asistencia médica no pudo salvar su vida. Había sufrido un fuerte golpe en la cabeza.
Ese día se terminaron las carreras en las calles para el karting y la dirigencia y pilotos emprendieron un proyecto ambicioso, contruir un kartódromo, el que hoy se encuentra en la zona de Alto Irpavi y que lleva el nombre de Carlos Sanz Guerrero como homenaje.
El documental refleja qué pasó ese día trágico con el testimonio de Carlos Aramayo, el expiloto y arquitecto Fernando Olmos y el periodista Mario Roque, quien transmitía carreras de autos y karting en aquella época.