Un gol que llegó desde una jugada con balón parado le impidió a la selección boliviana Sub-20 lograr al menos un empate, derrotada estrechamente por Ecuador (1-0), este domingo en Cali, por la segunda jornada del grupo B del Campeonato Sudamericano, que se realiza en Colombia.
Con una victoria sobre Venezuela (1-0) y a pesar de la derrota frente a Ecuador, además con dos encuentros todavía por jugar, Bolivia aún mantiene intacta su chance de avanzar al hexagonal final, al que pasarán los tres mejores de cada grupo.
El próximo encuentro de la Verde será el martes contra Chile, mientras que cerrará su participación en la primera fase, el jueves contra Uruguay.
Este domingo, Uruguay hizo su debut con un claro triunfo sobre Chile (3-0).
La falta de gol
Bolivia se enfrentó este domingo a un rival más fuerte físicamente y bien dotado de técnica, aunque le hizo frente con fortaleza defensiva, buen trato de la pelota, toques precisos en espacios reducidos, profundidad en los pases y velocidad, entonces también tuvo argumentos que le acercaron al arco contrario.
Lo que le faltó a la Verde fue potencia y puntería en la definición, por ello desperdició situaciones que tuvo para convertir.
La Sub-20 tuvo la situación más clara a su favor a los 60 minutos, cuando aún el resultado era un empate en blanco: Yomar Rocha llegó hasta el borde del área grande y sacó un potente disparo, pero el arquero Gilmar Napa logró bloquear, el rebote le quedó a Lucas Chávez, quien bajó la pelota con el pecho, aunque no le dio bien y la mandó por encima del travesaño.
Antes de ello, Fernando Nava, Daniel Ribera y Miguel Villarroel también dispusieron de posibilidades, entonces de nuevo sus remates terminaron neutralizados por el golero ecuatoriano.
El sufrimiento
A Bolivia también le tocó sufrir en algunos pasajes del partido, en los que Ecuador sacó ventaja del rubro físico.
La selección que defiende el título sudamericano se vio fortalecida por ese aspecto y su presión fue determinante para que llegara al único gol del partido.
A los 79 minutos, un servicio de esquina fue bien aprovechado por el lungo Garis Mina, quien se elevó más que sus marcadores y metió el cabezazo, descolocando al arquero Bruno Poveda, quien antes había tenido buenas paradas negando el gol de los ecuatorianos.
En la recta final Bolivia se lanzó en procura del empate, aunque sin poder superar la fuerte defensa ecuatoriana, que se dedicó a cuidar la ventaja.