Desde que Catar fue elegido país sede de la Copa del Mundo 2022, el país ha gastado en la organización unos 200 mil millones de dólares, según estimaciones privadas.
La impresionante cifra, que excede todos los cálculos, fue admitida por las instituciones gubernamentales que están a cargo de la organización.
Esos 200 mil millones de dólares fueron invertidos para llevar la Copa del Mundo al desierto del Golfo Pérsico y forma parte de un plan denominado Qatar National Vision 2030.
Entre las obras están los ocho modernos estadios, un aeropuerto internacional nuevo en Doha, al que están llegando las delegaciones de las selecciones participantes, un metro con tres líneas y 37 estaciones para los desplazamientos, además de la construcción de más de 100 hoteles y la remodelación de decenas de edificios públicos.
Aunque en los días previos todavía hay obreros en las calles ultimando detalles, prácticamente todas las obras nuevas fueron entregadas con gran anticipación.