Los arqueros Giménez y Ojeda, el zaguero Zenteno, los volantes Justiniano y Melgar y el lateral-delantero Rodríguez fueron los más destacados de un equipo aviador que dio pelea siempre.
Jorge Asturizaga / La Paz
- El equipo boliviano tuvo protagonistas que, además de un juego correcto, derrocharon energías en el Arena Baixada de Brasil. El Grupo C se definirá en la última jornada.
Jorge Asturizaga / La Paz
El punto obtenido por Wilstermann en Curitiba tiene sabor a victoria y sus pilares fueron el equipo como tal, pero también varios jugadores destacados.
Empezando por los arqueros, porque el paraguayo Arnaldo Giménez fue vital en el primer tiempo, como su reemplazante argentino Luis Ojeda en el segundo. Ambos fueron una muralla.
Giménez tuvo una doble atajada notable cerca del final del primer periodo, se lesionó y tuvo que salir. Ojeda –debutante con la camiseta de Wilster– paró al menos un par de cabezazos frontales que tenían destino de red.
La línea de tres atrás contó con un Edward Zenteno abanderado por su gran presencia, sacando pelotas por arriba y por abajo. Un veterano inacabable.
Leonel Justiniano y Antonio Melgar formaron la línea delante de los zagueros que se ocupó de bloquear el tránsito de la pelota en el medio.
Fue el tercero partido consecutivo en el que Patricio Rodríguez no solo mostró calidad, sino entrega. Este martes le tocó ser lateral y también atacante, corrió un montón por la banda derecha.
A veces solo y otras con Gilbert Álvarez, el argentino se dio modos complicar. Casi anota un gol. El técnico Cristian Díaz supo armar un equipo combinando esfuerzo físico, buen e inteligente juego. El punto tiene sabor a más.
Foto: Conmebol