Los ataques de Gabriel Esparza por la izquierda y la firme tarea de recuperación de balones de Juan Bautista Cascini en el medio campo fueron lo más destacado en The Strongest, que jugó ordenado en todas sus líneas y al menos sumó un punto en su visita al Caracas FC, por el Grupo B de la Copa Libertadores de América.
El Tigre se defendió muy aplicado en el primer tiempo, casi sin pasar sustos; mientras que en el segundo le aumentó a esa tarea un caudal ofensivo que lo hizo merecedor de la victoria, aunque ésta no llegó.
Esparza fue generador de las acciones de mayor peligro a favor del conjunto boliviano y le creó un montón de dificultades a su marcador Eduardo Fereira.
Como no había manera de controlarlo fue víctima de varias faltas cometidas por los venezolanos.
A los 90 minutos fue trabado en el área, pero el árbitro no cobró la pena máxima y dejó seguir el juego entendiendo que el atigrado se lanzó al piso.
Liderado por Cascini, el medio campo cumplió a cabalidad para cortarle todas las salidas al cuadro local. El desplazamiento del argentino estuvo bien cooperado por Fernando Saucedo y Luciano Ursino, quienes además se volcaron al ataque en la segunda mitad.
A Ursino le anularon un gol legítimo y Saucedo casi anota desde un tiro libre.
Lo más defensivo de The Strongest fue de Yvo Calleros, de un trabajo silencioso pero efectivo, hacia atrás, donde hubo firmeza en la tarea de Gonzalo Castillo antes de lesionarse, de Adrián Jusino y de los laterales Diego Wayar y Juan Pablo Aponte. Por las bandas, ambos hicieron imposibles las incursiones de la gente del Caracas FC.
El golero Guillermo Viscarra fue requerido poco por la tarea de sus compañeros, pero cumplió con firmeza. En la primera parte llegó a una pelota difícil rematada por Fereira cerca de su palo izquierdo y con las dos manos la mandó al tiro de esquina. Después contuvo un tiro de Saúl Guarirapa.
En el segundo tiempo, luego de un par de buenas atajadas, lo mejor del golero estuvo en el final, en los descuentos, una doble atajada —bloqueando un remate y luego lanzándose al piso para evitar un centro— que impidió el gol venezolano.