Una intensa lluvia caída alrededor de las 14.00, que duró aproximadamente una hora, anegó la cancha del estadio Hernando Siles, poco antes del inicio del partido entre Bolivia y Chile por las eliminatorias para el Mundial de Catar 2022, este martes en La Paz.
Por esa razón, el inicio del encuentro fue demorado en 30 minutos, por lo que se prevé que comience a las 16.30.
«Estamos preocupados, nos han dado media hora para que el agua desaparezca, para hacerla escurrir. Ojalá que el drenaje funcione», declaró a la televisión oficial Fernando Costa, presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF).
Trabajadores del escenario tuvieron que realizar tareas manuales para retirar el agua que ocasionó que se formaran grandes varios charcos en algunos sectores del terreno de juego.
Autoridades de la Conmebol y la terna de árbitros realizaron una inspección de las condiciones del piso y, luego de constatar que el balón no rodaba con normalidad, determinaron postergar el comienzo del juego.
La selección chilena también saltó al terreno para calentar, pero poco después retornó a su vestuario. La boliviana no apareció por el momento.
Hace unos días, el arquero de Bolivia Carlos Lampe criticó las condiciones de la cancha al decir que estaba «un desastre», aunque luego pidió disculpas por sus expresiones a través de un video.
A pesar de las condiciones climáticas, el público fue llegando a las graderías de Miraflores.