El anuncio para adelantar las elecciones de directorio en The Strongest, anticipado por el presidente Ronald Crespo, quedó en nada, con la determinación del directorio central de hacer cumplir el Estatuto Orgánico fijando el acto para el 12 y 13 de noviembre.
“Por un principio de responsabilidad las elecciones deberían adelantarse a octubre, ya que está previsto que en 2022 se jueguen tres torneos y el próximo presidente debería tener el tiempo para armar su plantel y estructurar todo lo que será su gestión”, hacía dicho Crespo a mediados de julio.
Sin embargo, el presidente y su directorio, reunidos el miércoles por la noche, optaron por mantener lo que dice la norma.
“Como dicta nuestro estatuto, las fechas definidas para la elección del nuevo directorio son el 12 y el 13 de noviembre”, confirmó el dirigente Cristian Alcoreza.
Una comisión del club, que será elegida en breve, trabajará de manera conjunta con el Comité Electoral de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), encargado de administrar los procesos electorales en los clubes y las asociaciones. “De esa manera no vamos a transgredir ni los estatutos del club ni de la FBF”, apuntó.
La cúpula atigrada también aceptó la renuncia de René Villegas al cargo de secretario general y en su lugar designó a René Palma, quien será uno de los integrantes de la comisión electoral stronguista para realizar un censo de los asociados del Complejo y los propietarios de los Tigres de Oro para determinar la cantidad de votantes habilitados.
¿No fueron todos?
La dirigente Verónica Moya denunció que Crespo y compañía no convocaron a la totalidad del directorio.
“El presidente Ronald Crespo se reúne con un grupo reducido de personas y no toma en cuenta a los demás miembros del directorio, en otras palabras, él se reúne sin quórum, por lo tanto, yo creo que esas decisiones no tienen validez legal”, declaró Moya, quien aseguró que es la secretaria de actas.
Sin embargo, el 10 de julio de 2019 había sido posesionada como presidenta de la comisión de Grupos de Interés del Fútbol.
Alcoreza mencionó que “seguramente ha habido un error de omisión de orden administrativo, pero ella ha participado en buena parte de la reunión, es una dirigente de gran trayectoria”.
Aseguró que antes de iniciar la reunión “se hizo el recuento de los participantes y se contaba con el respectivo quórum”.
En julio de 2019, cuando asumió Inés Quispe, fueron posesionados 57. En la reunión dl miércoles en Achumani no participaron más de 20 personas.