Juan Carlos Arce vivió un partido especial contra Bolívar, al que enfrentó por primera vez después de haberse marchado de la Academia, donde hasta diciembre fue el capitán, la figura y el líder.
El Conejo no disimuló sus enormes ganas de mostrarse en particular en este partido. En otros encuentros no se lo había visto así. La motivación de enfrentar a su “ex” estaba clara.
Al comienzo fue golpeado un par de veces por los celestes. Después pidió la pelota, intentó generar ataque y también colaboró en la marca. Hasta metió dos tacos.
Fue el autor del perfecto centro, desde un tiro de esquina, que Marc Enoumba conectó a los 12 minutos poniendo el 1 a 0.
Como Always retrocedió mucho sus líneas él también lo hizo y colaboró de mitad de cancha para atrás. Terminó agotado y sustituido por Javier Sanguinetti cerca del final.
Fue protagonista de una linda jugada: rescató la pelota, tirado en el piso y la pasó, luego se incorporó y corrió acompañando la acción. Vino el centro de Catuy y él dejó pasar el balón de manera muy inteligente, pero Fernando Saucedo remató muy alto. Iba a ser el segundo tanto.
Sintió una molestia en el aductor a los 64 minutos, recibió atención médica y decidió seguir. Un rato después fue reemplazado porque ya no daba más.
Cuando se marchaba de la cancha hubo hinchas de Bolívar que lo silbaron. Él festejó la victoria al final.
“Siempre dije que cuando me toque jugar contra ellos (en alusión a Bolívar), voy a dejar todo. Fuimos mejores, fuimos superiores y es merecida la victoria por lo que dejó el equipo en la cancha”, señaló al final a la televisión oficial.