El golazo de Alex Granell iluminó la tarde de Bolívar en el Félix Capriles. Le iba bien y pudo irle mejor a la Academia si la terna arbitral no se equivocaba horriblemente al anularle un gol legítimo. Pero a la larga todo se oscureció por sus errores en defensa que le costaron los goles de Palmaflor a partir de dos ‘pelotazos’. La casi derrota celeste fue salvada con un penal envuelto en papel de regalo (2-2).
La igualdad les costó a ambos perder el segundo lugar (de momento en poder de Nacional) que prometía ser para uno de ellos si había ganador. No solo eso, Palmaflor con 23 puntos y Bolívar con 22, dejaron la puerta abierta para que el líder The Strongest (28) se aleje más si el miércoles derrota a Real Tomayapo en el estadio Hernando Siles (19.00).
La obra de arte de Granell
El inicio del partido dio a pensar en un ida y vuelta, pero se fue trabando por la celosa acción en ambos lados, de manera que hubo mucho juego en la mitad y alrededores, y poco cerca de las áreas.
La primera jugada con traza de gol fue un cabezazo de Robson hacia un palo, se salvó Bolívar de la primera caída.
La segunda terminó en golazo. Granell presionó para quitar la pelota, se la devolvió Erwin Saavedra y el español mandó un zurdazo, desde unos 40 metros más o menos, y embocó un gran 0-1 a los 27 minutos, que lo sufrió el golero Johan Gutiérrez.
La Academia pasó a jugar con más aplomo y llegó fácil al segundo, inexplicablemente anulado por posición adelantada, que no la hubo ni cuando Saavedra partió por la banda ni cuando le sirvió el balón a Leo Ramos. Fue el primer grosero error de la terna encabezada por Ivo Méndez.
Guitián empezó a embarrarlo
Bolívar tenía bien controlado a Palmaflor, que no le hacía gran daño, salvo lo ocurrido a los 43 minutos. Fue cuando Alberto Guitián pasó vergüenza.
La jugada comenzó con un lanzamiento largo, desde su cancha, de Joaquín Lencinas, el zaguero europeo celeste pifió al intentar rechazar y la pelota le quedó servida a Vladimir Castellón, quien “vacunó” a su exequipo.
En el libreto de la Academia, que jugó con línea de tres atrás, no estaba cómo defender ante ese tipo de jugadas. A los 61 hubo otra, se fue Maxi Gómez y exigió la muy buena tapada de Cordano.
Cuatro minutos después Méndez sacó una roja directa incomprensible contra Adalid Terrazas dejando a Palmaflor con uno menos. A él fue a quien Saavedra le había cometido la falta.
El ‘concierto’ final
Bolívar no supo hacer valer el jugador demás que tenía en la cancha o Palmaflor se repartió de tal manera que no se sintiera esa ausencia.
Lo cierto es que el valluno, con uno menos, dio vuelta el score con otra pelota lanzada desde su cancha que una vez más la defensa celeste no pudo resolver, y que Jaime Santos, el goleador del conjunto local, aprovechó para poner el 2 a 1 a los 81.
Por si faltaba un error, el árbitro lo volvió a cometer al cobrar un penal por una mano de Lencinas que la norma indica que no es cobrable. Saavedra no se equivocó y a los 85 puso el definitivo 2 a 2 para que no ganara ninguno, sino que perdieran ambos.